¿Decir adiós a DeAndre Ayton? No por ahora. Phoenix Suns ha dado forma a un equipo repleto de estrellas –Bradley Beal ha aterrizado en Arizona para sumarse a Devin Booker y Kevin Durant– y la gerencia quiere ver hasta dónde pueden llegar sobre el parqué jugando junto al que fuese número 1 del draft de 2018.
Esa es la información que maneja Chris Haynes de Bleacher Report. El plan de los Suns es en estos momentos aferrarse a Ayton y ver cómo funciona junto a su Big Three. Pese a que han deslizado que está muy bien valorado en el mercado, no quieren dejar pasar la oportunidad de comprobar hasta qué punto es bueno el equipo con ellos cuatro; eso sí, dejando realmente complicado dar forma al resto del roster.
Los contratos de los jugadores mencionados suman un total de 162 millones de dólares en salarios, un tremendo gasto para solo cuatro piezas teniendo en cuenta que el limite salarial para la temporada 2023-24 está proyectado en 136 millones y el impuesto de lujo a partir de 165. Entonces… ¿estamos ante un deseo o una obligación?
Esa es la duda que surge leyendo a Adrian Wojnarowski de ESPN. Según este reputado periodista, los de Arizona se han quedado sin salidas con Ayton. Estaríamos hablando de que en estos momentos el mercado del center nacido en Bahamas es escaso; es decir, Phoenix podría traspasarlo, pero apenas conseguiría algo de valor a cambio, por lo que quedárselo se entiende como un mal menor.
Y justo aquí entra el cambio de estrategia. Es probable –casi seguro– que los Suns sigan abiertos a cerrar un traspaso con su pívot; sin embargo, filtrar que lo que realmente desean es mantenerlo en plantilla es la única forma de aumentar su valor de cara a hipotéticos compradores. Tienen un producto venido a menos y necesitan recuperarlo sin que pise el parqué –al menos hasta octubre–.
Extenuados salarialmente
Como decíamos, quedarse con Ayton supone que los Suns estén tremendamente limitados financieramente para rodear a sus estrellas; tanto es así que se puede dar el caso de que Cameron Payne, cuyo salario de 6,5 millones de dólares está parcialmente garantizado, sea el único jugador de la plantilla que no gane el máximo ni el mínimo.
Más allá de los cuatro máximos, Phoenix también tiene garantizados los contratos de Jordan Goodwin e Isaiah Todd, ambos por el mínimo. Según dictamina el convenio colectivo, los de Arizona no podrán hacer uso dela excepción bianual ni de la de nivel medio este verano, pero sí de una excepción comercial de 5 millones de dólares. Al menos tienen algunos derechos Bird con sus propios agentes libres: Darius Bazley (Bird), Jock Landale (Early Bird), Torrey Craig (Early Bird) y Josh Okogie (Non-Bird).
Un reto para Vogel
Pese a que Phoenix ha montado un equipo eminentemente ofensivo, ha confiado el mando del banquillo a Frank Vogel, quien justo destaca por su aportación defensiva desde la banda. Quizás el plan sea buscar un equilibrio entre el talento y la disciplina que imponga el nuevo head coach. Mientras lo descubrimos, es el propio Vogel quien deja claro que espera sacar lo mejor de DeAndre Ayton.
«Puede ser un gran elemento disuasorio en defensa y todavía hay áreas en las que puede crecer ofensivamente. Tengo la intención de conectarme realmente con él y restaurarlo a un jugador de nivel All-Star», avisa.
(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)