Hipotecar el futuro para competir un poco más en el presente. Ésa fue la apuesta de Washington Wizards con la adquisición de Bojan Bogdanovic, procedente de Brooklyn Nets, el pasado mes de febrero. La franquicia capitalina cedió una interesante primera ronda del próximo Draft 2017 —se espera que entre el puesto 20 y el 30— por tratar de aportar un poco más de poso a su banquillo. Aplaudible decisión por la que hacían más méritos en su escalada por la Conferencia Este y que ya ofrece sus primeros frutos importantes.
Bogdanovic, tras un comienzo de playoffs algo invisible y errático, completó este pasado miércoles su mejor actuación en la serie ante Atlanta Hawks. 14 puntos en 24 minutos de juego y 2 de 3 en lanzamientos desde la frontera del triple. Acierto. Ésa fue su inicial en el quinto encuentro ante Hawks —que ganaron los Wizards—. Durante los intervalos en los que está sobre el campo se le pide continuidad, que dirija los empujes ofensivos de los secundarios a través del acierto. Y eso hizo anoche. Clavó el propósito para el que fue reclutado, aunque sus números no fueran una obra faraónica.
En el cuarto encuentro —el penúltimo disputado hasta ahora— de la serie ante Atlanta, el escolta rayó también a un nivel aceptable. 13 tantos en 18 minutos para 2 de 4 en triples y 5 de 9 en tiros de campo. Nuevamente, eficacia. Ésa es la moneda que Scott Brooks y Washington compraron a Brooklyn.
Acierto y acierto
Y mientras siga rindiendo a ese nivel de los últimos partidos —es ya sexto hombre de Wizards en minutos—, su acierto con la red se traducirá también en puntería del movimiento que le llevó a Washington. Un acierto detrás de otro. Bogdanovic es más importante de lo que parece en el cuarto mejor equipo del Este.