Ambos equipos protagonizan la segunda mejor racha de la liga ahora mismo
Es la última afirmación que pensaría me tocaría hacer a estas alturas, en el lapso más caliente de la temporada recién estrenado. Orlando Magic y Detroit Pistons son, ahora mismo, dos de los equipos más en forma de toda la NBA.
El estatus de ambos conjuntos no da más que para invitados testimoniales (si llega) en los playoffs 2019, sin embargo a estas alturas del curso están mostrando su mejor cara; un semblante bastante más enguapecido de lo que la mayoría podíamos esperar.
Tanto Orlando como Detroit han saldado con victoria ocho de sus últimos diez compromisos y eso sitúa a ambos como la segunda mejor dinámica en un muestreo de diez encuentros. De toda la liga.
No sabría adivinar qué caso es más sorprendente de los dos, pues ambos se han recuperado de heridas que parecían tan mortales como para enviar su temporada 2018-19 a la desidia de navegar en tierra de nadie; ni luchando por nada importante pero con mejor cartel que los aspirantes a la lotería del Draft.
Detroit y el ataque
Empecemos el análisis de cómo han podido mejorar tanto, pues, por los Detroit Pistons.
Van lanzados. Con sus siete victorias en los últimos ocho encuentros han recuperado la confianza que se les presuponía a comienzo de temporada, la que mostraron en los primeros compases del calendario (llegaron a presentar balances de 4-0 o 13-7) pero que después perdieron la pista por completo.
El conjunto dirigido por Dwane Casey ha podido desterrar la lesiva doctrina del ‘Blake Griffin contra el mundo’ y, de esa manera, el rendimiento general ha mejorado. En sus últimos encuentros han podido además vencer a Indiana o Denver, por lo que su gran momento ha sido refrendado también con noches de exigencia alta.
Durante el mes de febrero, la productividad de los Detroit Pistons ha borrado cualquier prejuicio anterior, colocándose como el segundo mejor ataque (117,9) cada 100 posesiones, tras los Trail Blazers, y la octava mejor defensa (109,2) en el mismo rango de medición.
El salto es sideral, pues antes de eso Detroit se encontraba arrinconado como sexto peor ataque de la liga (105,4 cada 100 posesiones) aunque su defensa no rendía métricas demasiado negativas, 12º puesto de la liga con 108,1, de hecho.
Esa huella anterior ha sido editada sobremanera, y de la mano de un Blake Griffin mejor acompañado, los Pistons se han colocado con el séptimo mejor récord de la Conferencia Este (29-30). A ese ritmo no tardarán demasiado en alcanzar un balance positivo y con ello habrán sanado la desaliñada imagen que trasladaron hasta los comienzos de febrero.
Un acierto y dominio superiores de Andre Drummond bajo los aros y mejores actuaciones de Reggie Jackson han colaborado en la mejora del equipo de la Motor City. También está ayudando una mayor cooperación del banquillo o la oportuna incorporación de Wayne Ellington (y Bruce Brown) al quinteto titular. Todo suma para que los Pistons estén a punto de reconciliarse con el balance positivo y para que sean una candidatura clara de cara a los últimos lugares canjeables por un viaje a los playoffs.
Orlando es la defensa
Si tanto montan en Detroit, monta tanto en Orlando. De los Magic y su inesperado acelerón hablamos ya hace no mucho, sin embargo el equipo de Steve Clifford no ha retirado el ‘pedrolo’ del pedal que aumenta la velocidad de su viaje.
En el caso del grupo de Florida, han vencido en seis de los últimos siete partidos y por el camino apilaron los restos de rivales importantes como Toronto, Charlotte, Milwaukee, Minnesota o Indiana.
Sosteniendo la velocidad actual de crecimiento, los Magic serán también conjunto de playoffs en detrimento de Charlotte, que ahora mismo marca la frontera de la postemporada; sin embargo su renta sobre Orlando es ya de medio encuentro únicamente.
Y en el caso de los Orlando Magic, la solidez ha llegado con una mejora defensiva sin precedentes. En febrero, han sido el mejor equipo defensivo de la toda liga: 99,9 tantos concedidos por cada 100 posesiones, el único equipo reduciendo la centena casi obligatoria en esta estadística. Eso supone una marca mucho más enriquecida que los 109,0 puntos que encajaban hasta finales de enero.
Además de su disciplina repeliendo propuestas rivales, los Orlando Magic también son el noveno mejor equipo atacando el aro desde el mes de febrero. No solo ya Nikola Vucevic, sino que el resto de la columna también ha escuchado a tiempo el despertador para poder unirse a la lucha. Jonathan Isaac, Terrece Ross, las noches inspiradas de Fournier…
La única pega, quizá (por ponernos exigentes) es que Aaron Gordon no está entre los mayores y únicos responsables del aumento de velocidad en Florida. El alero está percibiendo un salario por encima de 20 millones de dólares esta temporada y su rendimiento no se ve del todo correspondido por su progresión en cancha, que se esperaba fuera superior.
Con Toronto e Indiana
De ese modo, tanto Orlando como Detroit trazan ahora mismo la segunda mejor racha de la NBA a 10 partidos vista. Empatados con Toronto e Indiana y solo por debajo de Milwaukee (9-1). Todos, por cierto, de la Conferencia Este, donde el tablero se está agarrando las vergüenzas para unas eliminatorias por el título en forma casi de cine para adultos.
Baste decir que si las eliminatorias por el título empezasen mañana, Boston y Philadelphia se verían las caras en primera ronda. Qué playoffs nos esperan este año. Y en ellos quieren estar tanto Pistons como Magic.
(Fotografía de portada: Gregory Shamus/Getty Images)