Un dato marca todos los resultados de los Timberwolves

Una máxima intacta tras 10 partidos

Antes de empezar la columna de hoy, me gustaría recomendar a todo el que no haya visto todavía el Suns-Lakers de ayer, que encuentre un rato durante el día para verlo entero. Merece la pena desde el principio hasta el final.

Y la verdad es que podría haber escrito hoy de la paciencia con la que está jugando esta temporada Devin Booker o de los triples desde la esquina derecha de Danny Green, porque ahora mismo no sé si ha fallado alguno en su vida. Pero, como la semana pasada ya hablé por aquí tanto de unos como de otros, os voy a contar una curiosidad sobre los resultados de los Minnesota Timberwolves que no comparte ningún otro equipo de la liga.

Con un 6-4 de récord (el mismo que los Suns, por ejemplo, aquí se puede consultar la clasificación), los Wolves son, en mi opinión, uno de los equipos sorpresa de este arranque de temporada. Y más aún si tenemos en cuenta que tres de sus cuatro derrotas han llegado contra gigantes de la liga: Sixers, Bucks y Nuggets.

Los primeros partidos de Karl-Anthony Towns fueron salvajes, la rotación en las alas es bastante que interesante (Covington, Graham, Okogie y Layman) y Andrew Wiggins, que es el que más titulares está dando estos días, parece haber empezado bastante mejor de lo que nos tiene acostumbrados (soy prudente con él porque es lo que recomienda el pasado).

En cuanto al colectivo, destaca que son uno de los tres equipos que más triples lanza esta temporada (por detrás solo de Rockets y Bucks) y que son Top-5 en ritmo. Son jóvenes y juegan rápido: nadie lanza más tiros que ellos por partido. Aunque los porcentajes, tanto de tiro como desde el triple, están entre los peores de la liga.

Pues bien, ayer por la tarde me puse el partido contra los Pistons. No había podido ver por la mañana el debut de Blake Griffin (el Boston-Dallas era un must) y la verdad es que me apetecía ver cómo regresaba y también el enfrentamiento Towns-Drummond. Y me encontré con lo siguiente: el comentarista de los Pistons citó el rebote como una de las claves del partido. Normal, teniendo en cuenta los pívots que saltaban a la cancha. Pero lo hizo porque, según sus datos, los Wolves no habían perdido ningún partido en el que hubieran ganado el rebote.

El dato me llamó la atención. Más todavía cuando, tras revisar los partidos de los Wolves, vi que estos habían perdido los cuatro encuentros (!!!) en los que no habían conseguido ganar la batalla del rebote: si se llevan el rebote, ganan. Y si no lo consiguen, pierden.

Contra los Pistons se cumplió de nuevo la máxima (ganaron 45-39 el rebote y se llevaron la W) y, tras revisar los partidos que llevan hasta la fecha disputados las 30 franquicias de la liga, os puedo asegurar que los Minnesota Timberwolves son el único equipo de toda la NBA que ha ganado todos los encuentros cuando se ha llevado el rebote y ha perdido todos aquellos en los que no lo han ganado.

En las victorias, ganan la batalla por 7,16 rebotes de media. Y en las derrotas, la pierden por 12,25 (!!!).

¿Curioso, no? Estaremos atentos por si la tendencia se mantiene.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.