¿Son estos Warriors tan buenos como los de 2015?

Tras dos temporadas viviendo el ostracismo de las lesiones y de quedar a las puertas de los playoffs, los Warriors se han reinventado. Steve Kerr ha conseguido volver a juntar a un grupo de jugadores que, igual que ocurrió con su primer gran equipo en la temporada 2014-2015, han sido capaces de sorprender a toda la liga. Pocos aficionados se esperaban a unos Warriors tan poderosos a estas alturas, en plena disputa con los Phoenix Suns por ser el mejor equipo de toda la NBA. Del mismo modo, hace siete años nadie se podía imaginar que un equipo que había sido eliminado en primera ronda de playoffs pudiese realizar una gesta de tal nivel.

Esa temporada 2014-2015 marcó el comienzo de un legado que terminó con tres de cuatro títulos posibles. Es más que probable que aquellos primeros Warriors, hombre por hombre, no fuesen el mejor equipo que tuvo la franquicia en esa era. Sin embargo, significaron el origen de algo mucho mayor que estaba por venir. Algo similar sucede hoy en día. Quizás estos Warriors no estén en su prime jugador por jugador, la plantilla puede mejorar con el paso de las temporadas. Sin ir más lejos, todavía están esperando a que se reincorporen a la dinámica del equipo jugadores tan importantes como Klay Thompson o James Wiseman, recientemente asignados al equipo de la Liga de Desarrollo.

Entonces, ¿estamos ante el comienzo de un nuevo legado? ¿Pueden estos Warriors compararse con los que ganaron el título y empezaron un nuevo ciclo en 2015? Hemos buceado en los datos y recogido los quintetos más utilizados por cada equipo. Posteriormente, usamos el PER junto con otros parámetros estadísticos para desglosar la comparación entre ambos conjuntos y este ha sido el resultado.

Bases

Golden State Warriors 14-15: Stephen Curry (28,0 de PER)

Golden State Warriors 21-22: Stephen Curry (23,5 de PER)

Para cualquier base de la liga sería injusto compararse al Stephen Curry de la temporada 2014-2015, incluso para el propio Curry como podemos comprobar. Fue el primer gran año de su carrera y, a pesar de que a nivel de anotación (23,8 puntos por partido) estuvo por debajo de muchas de sus temporadas, su repercusión y eficacia plasmó una inmensa superioridad. No se puede analizar esa temporada sin destacar las más de 7 asistencias por partido y los 2 robos que promedió. Además, jugaba con el hándicap añadido de que en muchos de sus partidos no disputaba minuto alguno en los últimos cuartos debido a las victorias aplastantes de Golden State.

Esta temporada estamos ante un Curry diferente. Tras verse solo la temporada pasada, sin ninguna estrella que le acompañase, ha adapto su estilo. Juega más minutos y promedia más puntos por partido que el de hace siete años. Sin embargo, aunque sus porcentajes de tiros de campo (43%) y triples (39,8%) siguen siendo buenos, ya no mantiene el nivel de eficiencia casi extraterrestre. Eso sí, estamos ante la versión más triplista de Steph, nunca antes en su carrera había anotado tantos triples por partido (5,4).

Al no tener, de momento, una segunda espada tan marcada como Klay Thompson ha tenido que aproximarse más al hero ball y asumir mucho más protagonismo. En la 14-15, Curry promedió 16,8 tiros de campo, lo que suponía un 19,3% de los tiros de su equipo. Este curso lanza 20,3 tiros de campo por encuentro, casi uno de cada cuatro tiros de su equipo lo lanza él.

En esta primera comparación la ventaja cae ligeramente sobre los Warriors de 2014-2015 con la antigua y casi insuperable versión de Stephen Curry.

Escoltas

Golden State Warriors 14-15: Klay Thompson (20,8 de PER)

Golden State Warriors 21-22: Jordan Poole (14,8 de PER)

Probablemente sea la posición en la que más diferencia existe entre ambas plantillas. Jordan Poole está haciendo una temporada más que digna, pero incomparable a lo que solía aportar Klay Thompson. En cuanto a la anotación pura, la distancia entre ambos salta a la vista, Thompson (21,7) promedió casi 4 puntos más que los que produce Poole (17,9). Además, si nos fijamos en los porcentajes la desigualdad es todavía mayor. Mientras Klay anotó un 43,9% de sus triples intentados, el actual escolta de los Warriors solo acierta el 33,8%.

La pareja que Thompson hacía con Curry es uno de los mejores dúos de la historia de la liga, ambos estaban perfectamente sincronizados. Ese puesto de escudero no ha vuelto a ser el mismo desde la lesión del californiano. No se puede decir que Curry mezcle mal con Poole. Sin embargo, los números muestran como esta temporada está encontrando su mejor juego cuando a su lado tiene a un complemento de un perfil más defensivo como Gary Payton II. Con el hijo de The Glove tiene un impresionante Net Rating de 28,7 que contrasta con el aceptable 14,6 que tiene con Poole.

La conclusión es clara: los Warriors de la 14-15 también se llevan el duelo de los escoltas.

Aleros

Golden State Warriors 14-15: Harrison Barnes (13,4 de PER)

Golden State Warriors 21-22: Andrew Wiggins (17,4 de PER)

El primer puesto en el que los actuales Warriors podrían superar claramente a los pioneros. Es cierto que el Barnes de la 14-15 interpretaba muy bien su rol en el equipo, pero esta temporada Wiggins está impresionando incluso a los más incrédulos. El joven alero promedia más de 18 puntos por partido, casi el doble de los que aportaba Barnes. Además, sorprende positivamente sus buenos porcentajes en triples, lanzando por encima del 40% de eficacia por primera vez en toda su carrera.

Asimismo, Wiggins también asiste, roba y tapona más que aquel Harrison Barnes. Además, se ha convertido en uno de los jugadores defensivos más importantes del equipo. Comparando las estadísticas avanzadas que nos ofrece NBA Stats de rating defensivo, podemos ver como Andrew (100,8) poco tiene que envidiar a aquel Barnes (98,4).

La respuesta parece clara, aunque Wiggins sigue sin ser el número 1 del Draft que esperaban los Timberwolves, esta renovada versión del canadiense en los Warriors es mejor que la de aquel Barnes.

Ala pívots

Golden State Warriors 14-15: Draymond Green (16,4 de PER)

Golden State Warriors 21-22: Draymond Green (15,3 de PER)

Como sucedía con Curry, Green es otro jugador que repite en el quinteto siendo unos años más veterano. Parece que Draymond se ha acercado a su nivel tras un par de temporadas de menor rendimiento. Sin embargo, todavía le falta un poco para volver a ser la pieza clave que fue en aquella temporada. El Green de 2021 es un jugador que anota menos puntos y prácticamente se ha olvidado de lanzar triples. Nunca ha sido un especialista en esta faceta, pero su puntual amenaza desde el perímetro permitía a aquellos Warriors jugar con un determinado estilo. Actualmente sus porcentajes son pésimos (27,6%) y su número de lanzamientos ha bajado.

En donde sí que ha mejorado Draymond es en la producción ofensiva a través del pase. Existe método dentro de su caos. Produce más de 7 asistencias por partido siendo el undécimo jugador de la plantilla en USG% (calcula en qué porcentaje de jugadas del equipo estuvo involucrado un jugador mientras estaba en la cancha). Generar tantas asistencias tocando tan poco el balón está al alcance de un pequeño grupo de elegidos.

En conclusión, podríamos hablar de empate técnico en esta comparación. Green es un jugador diferente al de hace siete temporadas, pero sigue siendo igual de útil para Kerr.

Pívots

Golden State Warriors 14-15: Andrew Bogut (15,8 de PER)

Golden State Warriors 21-22: Kevon Looney (16,1 de PER)

La memoria colectiva ha olvidado lo fructífero que fue Andrew Bogut para los Warriors de la 14-15. El australiano promedió casi 2 tapones por encuentro y fue uno de los responsables directos de la gran defensa del equipo. En el transcurso de esa temporada, promedió un espectacular rating defensivo de 95,7, el mejor de su equipo. Su buena labor le sirvió para ser elegido en el Segundo Quinteto Defensivo de la temporada. Cuando se trata de proteger el aro, las prestaciones que ofrecía Bogut todavía están por encima de las de Looney.

Kevon goza de menos protagonismo del que tenía Andrew, sus 19 minutos por partido contrastan con los casi 24 que obtenía el australiano. Sin embargo, es capaz de producir prácticamente el mismo número de puntos por partido asumiendo menos tiros. En el aspecto ofensivo si que parece ser ligeramente superior, aunque tampoco podemos decir que se le caen los puntos de las manos.

En los dos equipos a examinar, la posición de pívot es la más floja. Esto ha sido una constante en los Warriors de la era moderna. Quizás el gran nivel defensivo que Bogut mostró aquella temporada decante la balanza de esta comparación. Aún así, hay que tener en cuenta que, a priori, Looney solo está remplazando el puesto del lesionado James Wiseman, que probablemente mejoraría sus prestaciones.

Valoración general

Golden State Warriors 14-15: récord de 25-5 tras 30 partidos disputados.

Golden State Warriors 21-22: récord de 24-6 tras 30 partidos disputados.

Después de haberse disputado más de un tercio de la temporada ya podemos decir que los Warriors están de vuelta. El récord de 24-6, además de colocarles en la zona alta de la clasificación, es el mejor de sus últimas cuatro temporadas. Una de las claves que puede explicar esta escalada es la mejora del nivel defensivo.

Kerr, que siempre ha pensado que para competir al más alto nivel tienes que ser uno de los mejores equipos en defensa, ha vuelto a conseguir el objetivo que se proponía hace poco más de un año. El cambio es significativo, los Warriors vuelven a proteger su aro de forma coral y eficaz. Su rating defensivo (101,3) nunca había sido tan bajo precisamente desde el año 2015.

Otra de las claves del retorno competitivo de los Warriors es algo que siempre ha acompañado a los equipos que dirige Steve Kerr: el movimiento de balón. Una temporada más, los Warriors son el conjunto que más asistencias realiza por partido (28). La franquicia de San Francisco, con siete apariciones, protagoniza el Top 10 de los equipos que más asistencias por partido han promediado en una temporada en el siglo XXI.

Puede haber una explicación lógica: tener a Curry en tu equipo suele aportar un espacio extra para los compañeros que, a su vez, tienen muy clara la consigna de circular rápido la pelota hasta encontrar al tirador liberado. En la 2014-2015 funcionaban exactamente igual y también lideraron la liga en canastas asistidas por encuentro (27,4). Es una de sus señas de identidad.

Las similitudes entre los Warriors actuales y los vintage son múltiples y van en aumento. Además, el equipo de la bahía ya tiene las piezas adecuadas que pueden mejorar las prestaciones actuales en los puestos más sensibles como el de escolta o pívot. Son casos distintos, pero si Klay Thompson y James Wiseman regresan a la dinámica a un buen nivel pueden catapultar a la franquicia hacia una nueva dimensión e, igual que hicieron sus predecesores en 2015, empezar un nuevo legado.

(Fotografía por Ezra Shaw/Getty Images)