Andre Iguodala disputará a partir de este miércoles sus sextas Finales de la NBA consecutivas. Será la primera de ellas con la camiseta de los Heat después de eliminar a Boston en las Finales del Este. Previamente, el alero disputó cinco Finales sin descanso con los Golden State Warriors, conquistando tres campeonatos en dicho lapso.
Con una experiencia tan dilatada en grandes momentos, el MVP de las Finales de 2015 fue cuestionado sobre las diferencias y similitudes que ha hallado entre ambas organizaciones. Sin embargo, Iguodala consideró innecesario hacer cualquier tipo de comparación sobre ellas.
«Odio compararlos», admitió el veterano jugador en una entrevista para The Athletic. «No creo que sea realmente justo para ninguno de los dos, así que trato de no compararlos. Son totalmente diferentes.»
Inmediatamente después, Iguodala destacó la importancia del que ha sido el gran arquitecto de la franquicia durante el último cuarto de siglo: Pat Riley.
«Es la cabeza de la serpiente, la base, o como quieras llamarlo», prosiguió el tres veces campeón de la NBA. «Es realmente quien ha visto todo esto desde mediados de los 80. Ha mantenido su filosofía durante todo este tiempo. Con el transcurso del tiempo ha evolucionado, ya sea en tecnología o cualquier matiz que afecte al juego. Pero sus principios siguen ahí.»
Tras ello retomó la cuestión inicial sobre las similitudes entre Golden State y Miami. Iguodala lo tiene claro: no es tan importante la metodología sino el hecho de que ambas franquicias han logrado alcanzar el éxito siguiendo su propio camino. «Al final puedes tomar distintos caminos hacia el éxito. Los principios se mantienen. Son diferentes formas de llevar el talento al siguiente nivel y ambos han tenido éxito en la forma en la que lo han hecho. Tengo un profundo aprecio por ambas organizaciones.»
Aún así, el jugador reconoció que la cultura de su actual franquicia y la ética de trabajo que persiguen a diario componen una realidad única que no había experimentado en ningún otro lugar con anterioridad.
«He estado 16 años en la liga. He pasado por nueve entrenadores y cuatro organizaciones. Así que he visto un poco de todo. Aquí es diferente. La llevan [la ética de trabajo] a otro nivel. Los muchachos que están aquí, cuando son jóvenes, no conocen nada mejor. Entonces, cuando van a otro lugar es como…».
Una frase suspendida que no necesita más continuación que esas dos palabras que definen a la perfección lo que pretende explicar: ‘Cultura Heat’. Una filosofía estructural y deportiva que busca mantener la competitividad lo más alto posible en todo momento, construida sobre un perfil de jugador muy definido. Andre Iguodala encaja perfectamente en esa definición. Y ahora, busca un nuevo campeonato. La última piedra hacia la cima la componen Los Angeles Lakers.
(Fotografía de portada de Kevin C. Cox/Getty Images)