El tendón de Aquiles lleva toda la temporada dando problemas a Anthony Davis. Durante las primeras semanas se perdió partidos sueltos por molestias. Su idea y la del equipo era tratar la dolencia con descansos puntuales que le permitiesen seguir jugando; sin embargo, al ver agravada la lesión en el partido ante Denver, entendieron que había llegado el momento de parar.
En un primer momento, y según información de Adrian Wojnarowski de ESPN, los Lakers esperarían dos o tres semanas para volver a evaluar el estado de su jugador, a quien las pruebas diagnosticaron con una distensión en la pantorrilla que se sumaba al agravamiento del problema en el Aquiles. Con ese contexto, la franquicia angelina ha optado finalmente por examinar a su estrella hace escasas horas, evaluación que les ha llevado a confirmar, por voz de Frank Vogel, que la ausencia del jugador interior se extenderá al menos cuatro semanas a contar desde ahora.
«Queremos tratar de dejar esto completamente atrás y ser conservadores con su lesión para asegurarnos de que esté completamente recuperado antes de que regrese», explica el head coach de los Lakers.
Las cuatro semanas mencionadas sería el tiempo necesario para que Davis lleve a cabo su rehabilitación, se recupere plenamente y pueda ir aumentando el trabajo en los entrenamientos hasta estar listo para volver a la acción. En todo caso, será pasado ese tiempo; es decir, ya después del All-Star, cuando se conozca con exactitud en qué fecha estaría nuevamente disponible para Vogel.
La baja de La Ceja supone un duro golpe para los de oro y púrpura en la pelea por la primera plaza de la Conferencia Oeste. Utah Jazz no levanta el pie del acelerador y les aventaja ya en dos partidos y medio. En las próximas semanas, si los de Salt Lake City mantienen el ritmo, podrían conseguir una distancia que prácticamente les convirtiera en inalcanzables para sus perseguidores.
(Fotografía de Tim Nwachukwu/Getty Images)