Atlanta cierra una racha de 11 derrotas seguidas ante los Spurs

Desde su llegada a Atlanta en 2013, Mike Budenholzer nunca había podido derrotar a Gregg Popovich, su mentor durante 17 temporadas. Los Hawks, de hecho, acumulaban una racha de 11 derrotas consecutivas ante San Antonio que terminó en el primer día de 2017. Con tiempo extra incluido, Atlanta sacó el triunfo por un ajustado 114-112.

Paul Millsap, justo después de filtrarse que sus Hawks estaban abiertos a su traspaso, firmó uno de sus mejores partidos de la temporada. El ala-pívot terminó con 32 puntos y 13 rebotes para mantener a flote a su equipo frente al siempre peligroso equipo de San Antonio. Su cotización aumentó de forma considerable ante unos Spurs que solo habían permitido 30 puntos esta campaña a DeMarcus Cousins y James Harden.

Igualdad máxima

Delante, un jugador de características ofensivas similares como LaMarcus Aldridge (27 puntos y 13 rebotes) daba la respuesta junto al mejor Tony Parker de los últimos meses. El base francés, tras unos decepcionantes Juegos Olímpicos y su producción más baja con San Antonio desde su año de novato, complicó la noche al joven Dennis Schröder con 22 puntos.

El acierto en el triple de los Hawks (14/28, con Kyle Korver como su mejor ejecutor) acababa de equilibrar un duelo en el que ningún equipo se sintió con una ventaja cómoda. San Antonio, eso sí, entró en el minuto final con ventaja, pero un triple de un Tim Hardaway Jr. espectacular en los momentos calientes mandaba el partido a la prórroga.

Resolución y fin de maldición

Hardaway Jr. sumó 18 de sus 29 puntos entre el último cuarto y el tiempo extra. Budenholzer apostó por él en lugar de Kent Bazemore para cerrar el partido, y no decepcionó. Los Hawks abrieron hueco de su mano en los primeros minutos de la prórroga, obligando a los Spurs a ir a remolque para mantenerse con vida. Los fallos en los últimos tiros libres de Atlanta le permitieron una última oportunidad, pero Kawhi Leonard falló la bandeja que hubiera forzado un segundo triple extra.

Era, por tanto, la primera victoria de Atlanta contra los Spurs desde 2010 (Marvin Williams fue el máximo anotador con 26 puntos) y segunda desde 2005. Entonces Mike Budenholzer se sentaba en banquillo de los Spurs al lado de Gregg Popovich. Ahora, por primera vez desde su llegada a los Hawks, pudo celebrar el triunfo desde el lado rival.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.