La máxima anotación en la carrera de Ben Simmons, 42 puntos, no evitó que los 76ers se unieran a la extensa nómina de equipos que han hincado la rodilla ante el mejor récord de la NBA, en manos de Utah Jazz. El base tomó las riendas de la ofensiva del equipo ante la ausencia de Joel Embiid, respondiendo con una de las mejores actuaciones de su carrera.
Sin embargo, la velada se tornó amarga para el Novato del Año de 2018 por dos razones. Primero, por la derrota. Y segundo, por el que fue uno de sus principales defensores durante gran parte del encuentro, Rudy Gobert. Una asignación que Simmons interpretó como una falta de respeto, aunque agradeció la situación.
«Sí, me encantó ver que Rudy me defendía», afirmó el jugador, entre risas, según recoge el medio Deseret News. «Quiero decir, me encanta poder atacar a alguien así. Sentí que era una falta de respeto que lo pusieran a defenderme.»
Precisamente, el pívot de los Jazz ha sido galardonado en dos ocasiones con el premio al Defensor del Año de la NBA. Un galardón al que aspira Simmons y que ya se propuso como reto personal antes del inicio de la temporada. De hecho, él mismo se autoproclamó el «mejor defensor de la liga» hace apenas unos días tras defender a Damian Lillard.
(Fotografía de portada de Tim Nwachukwu/Getty Images)