Si hace un par de semanas señalábamos que aún no había fecha de regreso para Trae Young, ahora parece que tal incógnita se va despejando, ya que los propios Atlanta Hawks han anunciado que su jugador ha sido autorizado para regresar a los entrenamientos tras seis semanas ausente a causa de una cirugía en el dedo meñique de su mano izquierda.
Esta noticia confirma que la baja del base All-Star se ha alargado más de lo esperado. Tras saber que pasaría por el quirófano, los servicios médicos de la organización de Georgia estimaron que le perderían al menos cuatro semanas, pero pensaban que no se llegaría a las seis (pueden ser siete). En cualquier caso, la buena noticia es que parece que podría volver a la acción antes del cierre de la regular season y, por tanto, disputar el play-in contra Chicago Bulls, el cual –en caso de ganar– les daría la oportunidad de acceder a playoffs con una victoria más.
Lo cierto es que a Atlanta no le ha ido del todo mal sin Young. En su ausencia han firmado una marca de 12-10 que les ha llevado a un balance de 36-42; es decir, que la campaña sea mala poco o nada tiene que ver con la lesión del base, ya que antes estaban incluso peor.
Más allá de lo que diga la clasificación, es obvio que para los Hawks supondría un impulso recuperar al definido como su jugador franquicia; no en vano en la presente campaña ha disputado 51 partidos para promediar 26,4 puntos (mejor marca del equipo) y 10,8 asistencias (récord de su carrera).
(Fotografía de Kevin C. Cox/Getty Images)