Tras el reciente despido de Kevin McHale por parte de los Rockets, ya sobrevuelta en la liga quién será el siguiente técnico que diga adiós a su puesto en el banquillo.
Preguntado sobre esta circunstancia, Mark Cuban, que siempre es proclive a opinar sobre los diferentes temas de actualidad que rondan la competición, quiso echar un capote a los que mandan en Houston.
Para el propietario de Dallas, lo realmente complicado no es llegar y despedir a un entrenador, algo que se soluciona con descolgar un teléfono. Lo difícil es acertar con el técnico que contratas para que gestione tu plantilla y sea capaz de alcanzar las metas propuestas a comienzo de campaña.
“Lo más difícil para un propietario de una franquicia NBA es contratar a un entrenador, y lo más fácil es despedirlo. El motivo de ello es que los entrenadores son muy buenos en [las entrevistas] cara a cara. Ellos conocen cuáles son tus debilidades y saben exactamente cómo vender esos puntos débiles”, expresó el ejecutivo en Boston Globe.
“Es muy difícil tomar la decisión más correcta, y depende en un 90% de la suerte. Como lo mas complicado es encontrar un entrenador, [cuando lo encuentras] quieres casarte con él. Ponerle un anillo”, añadió Cuban, quien recientemente ha renovado a Rick Carlisle para los próximos cinco años.