El caso de DeMarcus Cousins es tan claro como triste. El pívot de ahora 34 años estaba llamado a ser uno de los mejores en su posición durante mucho tiempo; sin embargo, la rotura del tendón de Aquiles en 2018 dio al traste con su carrera, al menos con la que estaba destinada a la élite.
Pese a tener numerosos intentos para volver a engancharse a la NBA, la realidad es que en ningún equipo se ha reencontrado con su juego ni con la confianza de esas mismas organizaciones, las cuales contaban con él un año –o ni eso– y volvían a soltarlo. Así, entre 2019 y 2021 Cousins pasó por Golden State Warriors, Houston Rockets, Los Angeles Clippers, Milwaukee Bucks y Denver Nuggets.
Cansado de tanta mudanza casi sin sentido, en los dos últimos años ha probado lo que es jugar en las ligas de Puerto Rico y Taiwán. Allí ha disfrutado; es más, con los Taiwan Beer Leopards se ha proclamado campeón y MVP. ¿Le gustaría volver a la NBA? Sí, pero entiende que a estas alturas no tiene nada que demostrar para que así sea.
«Ya no voy a intentar convencer a estos muchachos. Saben lo que aporto en la cancha. Está demostrado. Si realmente quisieran saber quién soy, se tomarían el tiempo de conocerme en lugar de escuchar lo que dicen otros. Ya no intentaré ningún acercamiento. Si surge una oportunidad que tenga sentido, la consideraré, pero ya no quiero convencer», comenta en el podcast Club 520.
Lo último que sabemos de Cousins es que jugará un campeonato 3×3 con los Wuxi WenLv, equipo chino que estará en los mundiales que organiza la FIBA. Recordemos que el center fue medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
(Fotografía de Ethan Miller/Getty Images)