En su primera toma de contacto como entrenador de los Boston Celtics, Ime Udoka se ha mostrado muy ilusionado con su grupo de jugadores. Especialmente con Tatum, Brown y Smart, a los que ya entrenó como asistente de Popovich en la selección estadounidense que acudió al Mundial de Baloncesto de 2019. El recién llegado técnico ha acudido junto con Brad Stevens y los dueños Wyc Grousbeck y Steve Pagliuca a su presentación en las instalaciones de los Celtics. «Sé que me van a dejar entrenarles y presionarles» decía sobre sus nuevos jugadores.
«Ellos saben que voy a estar todo el día detrás de ellos y que eso es lo que les gusta de mí» aseguraba Udoka. El tono de absoluta confianza coincide con las informaciones que apuntaban al vínculo establecido la estancia que compartieron con el equipo de Estados Unidos. Ni siquiera rehuía las expectativas con las que llega a un banquillo legendario «Lo más importante es que ellos quieren ganar y ayudarnos a levantar nuestro decimoctavo título».
Durante toda su comparecencia el nuevo técnico hace hincapié en llegar con un plan de trabajo duro y físico que lleve a los pilares del equipo al próximo nivel. «Obviamente el talento físico está ahí. Ahora es el momento de que den el siguiente paso en ser mejores líderes, más vocales y se sigan exigiendo ser grandes». Ime Udoka llega con un dilatado currículum que le ha visto ser jugador de Los Angeles Lakers, New York Knicks, Portland Trail Blazers, Sacramento Kings y San Antonio Spurs. Recientemente también como parte del cuerpo técnico de los propios Spurs, Philadelphia Sixers y Brooklyn Nets. Un bagaje que Brad Stevens ha esgrimido como determinante para su contratación.
(Fotografía de portada de Maddie Meyer/Getty Images)