La confianza del cuerpo técnico de los Dallas Mavericks se mantiene intacta a pesar de haber caído por debajo del 50 por ciento de victorias tras las últimas dos derrotas sufridas. O al menos esa es la imagen de tranquilidad que busca emanar la organización.
El entrenador jefe Jason Kidd insiste en el que el objetivo de los Mavericks sigue siendo el campeonato de la NBA, tal y como ya compartió tras la incorporación de Kyrie Irving. «La clasificación será diferente tras el último partido de la temporada», afirmó Kidd, de acuerdo con una entrevista para Mavs.com. «Si podemos estar sanos y tener a todos en cancha, tendremos mejor oportunidad para ganar. Sentimos que tenemos las piezas para ser un equipo campeón. Estamos jugando por un campeonato. Pero, en este momento, tenemos que concentrarnos en el partido que tenemos en el horizonte. Y ese es Charlotte.»
En las últimas dos semanas, Dallas ha recopilado un récord de dos victorias y cinco derrotas que ha supuesto una caída desde el quinto hasta el noveno puesto de la Conferencia Oeste, en unos partidos salpicados por las ausencias de Luka Doncic y Kyrie Irving.
De hecho, el propio Kidd declaró a mediados del presente mes de marzo que están jugando «con las cartas» que les ha tocado y que la salud de sus principales jugadores determinará el techo deportivo del equipo. Aún así, la sensación de urgencia está cada vez más presente.
(Fotografía de portada de Tom Pennington/Getty Images)