Este martes, el partido que enfrentará a Houston Rockets y Washington Wizards marcará el primer enfrentamiento de John Wall contra la franquicia que había sido su hogar durante toda su carrera deportiva en la NBA. El base fue seleccionado en el primer puesto del draft de 2010 por la organización capitalina, donde se convirtió en uno de los mejores bases de la liga. Sin embargo, dos graves lesiones lo mantuvieron en el dique seco durante dos años y sería traspasado a Houston antes de poder regresar.
El ambiente se había vuelto bastante turbio y tanto jugador como franquicia no cerraron la etapa de la mejor forma posible. De hecho, Wall ha reconocido al medio NBC Sports Washington que se tomará este encuentro como algo personal y con claros aires de venganza.
«Solo pienso en todos aquellos que están allí que no creían que pudiera volver a jugar a buen nivel. Y probablemente muchas personas que tenían algo que decir al respecto de mi traspaso», explicó el cinco veces All-Star. «Siento que fue todo un proceso y no algo que sucediera de la noche a la mañana. Esa es mi motivación.»
El periodista Chris Miller insistió en este tema con el objetivo de profundizar más en él y el base no tuvo reparos en mostrar su postura. «Siento que es algo personal. Definitivamente lo siento porque sé cuál fue mi responsabilidad en lo que hice fuera de la cancha y las cosas que dije, pero reconocí todo ello. Me disculpé y eso es lo mejor que puedo hacer. Nadie es perfecto. Todos vivimos y aprendemos de nuestros errores. Ojalá nunca hubiera sucedido, pero sucedió, sí. Seguí adelante. Mi intención siempre fue volver y competir a un alto nivel con la única camiseta que vestí durante diez años. […] Así que esa es mi motivación. Pensaron que estaba acabado. Y esta es mi oportunidad para demostrarle que esto no ha terminado. Pero lo más importante sigue siendo conseguir la victoria. No me importa qué números haga. Quiero ganar.»
Wall no quiso dar nombres ni señalar a nadie de forma directa pero sí que admitió estar dolido por la falta de honestidad y la gestión de los Wizards durante su traspaso a Texas a cambio de Russell Westbrook. «Lo más importante es que lo que realmente quería desde el principio era que me dijeran la verdad. Eso es lo más importante y lo que hizo que todo fuera difícil de entender porque no me dijeron la verdad. Entiendo que es un negocio, las cosas pasan y la gente sigue adelante. Cuando escuché los rumores, llamé y pregunté si eran ciertos o algo de lo que no preocuparme. A partir de ese día todo lo que escuché es que no eran ciertos. Pero, en realidad, lo eran», sentenció Wall.
El ex de Kentucky nunca había sido parte activa de unos rumores de traspaso y es posible que este nuevo escenario no haya sido fácil para él. Más todavía si, realmente, la franquicia no fue honesta y clara con su situación. Dicho esto, no deja de ser habitual que las organizaciones mantengan en secreto cualquier tipo de operación inminente a los jugadores involucrados. Ya sea para evitar filtraciones, una pérdida de valor en el mercado o su posterior rebeldía en caso de no concretarse el acuerdo.
De momento, desconocemos la historia desde ambas perspectivas pero, a cambio, disfrutaremos de un partido del que posiblemente haya mucho que hablar en las horas venideras.
(Fotografía de portada de Carmen Mandato/Getty Images)