No somos devotos del morbo fácil y la polémica barata en nbamaniacs. Adrian Wojnarowski, sospecho, tampoco lo es. Y por eso Woj, investigador incansable, ha querido arrojar algo de luz curricular sobre el enfrentamiento verbal entre Draymond Green y Kelly Olynyk, el cuál ha desembocado en una serie de descalificativos sobre este último.
Descalificativos que, además, viniendo de quien vienen, agitan las aguas y generan un consecuente posicionamiento entre los aficionados y foreros. Posicionamientos, permitidme, a veces un tanto carentes de la reflexión necesaria. Es sencillo caer en la crítica fácil, en el encasillamiento y en la etiqueta. Olynyk, desde que le dislocó un hombro a Kevin Love, está sentenciado.
Un desmesurado forcejeo en una jugada aislada en los primeros compases de aquel encuentro entre Celtics y Cavaliers, terminó con Love camino presuroso de los vestuarios con el hombro izquierdo dislocado. Tras el partido, con el brazo caliente y el ánimo aún crispado, el ala-pívot de los Cavs aseguró que había existido intencionalidad por parte de Olynyk en lesionarle. Una acusación seria y un par de nexos causales perdidos por indemostrables.
A cada bando un color y distinta realidad. Danny Ainge, sorpresa, no vio más que «una falta normal, dos hombres peleando por una pelota dividida».
Los datos hablan
Y nosotros, a falta del poder de omnisciencia —no podemos excarvar en la mente de Kelly—, jugaremos con los datos. Esos que, para empezar, nos dicen que el de los Celtics no fue sancionado más que con una simple falta personal por aquella acción. Ni técnica ni flagrante siquiera.
Técnica que tampoco recibió en la pantalla ilegal que realizó ante Kelly Oubre Jr. durante el partido del pasado día 5 entre Boston y Washington, y que sin embargo sí terminó con el de los Wizards en las duchas tras ser sancionado con una flagrante tipo 2 por los árbitros, fruto de su desmesurada reacción.
https://twitter.com/SInow/status/860295041927008260?ref_src=twsrc%5Etfw&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.si.com%2Fnba%2F2017%2F05%2F06%2Fkelly-oubre-suspended-kelly-olynyk-fight-wizards-celtics
Así pues, el informe que recoge Woj es claro y escueto. Cuarta temporada del pelirrojo en la NBA desde que fuera seleccionado en el Draft 2013. Su bagaje de agresividad, en lo que ha sido el juicio arbitral, se resume en 3 técnicas, cero flagrantes y ni una sola expulsión.
Ahora, con la ventaja que otorga el tiempo, la lejanía, el análisis pausado y ponderado y las ciento cincuenta cámaras que plagan los pabellones y nos permiten ver cada acción polémica a ritmo ralentizado y desde todo ángulo imaginable, os lanzamos la afirmación de Green pero esta vez custodiada entre interrogantes ¿Es Kelly Olynyk un jugador sucio?