Lo que empezó como una llamada compartida por cerca de un centenar de jugadores para expresar sus preocupaciones respecto al retorno de la temporada NBA –algo que enlaza directamente con el movimiento surgido en busca de la justicia social y la igualdad racial–, está convirtiéndose en una coalición con inquietudes y motivaciones en común.
Con Kyrie Irving y Avery Bradley como principales precursores, el lunes tuvo lugar otra conferencia en la que estuvieron presentes otros 40 jugadores y en la que se incluyó a miembros de la WNBA y a personas de la industria del entretenimiento; e incluso se ha discutido la posibilidad de representar no solo a personajes públicos sino también a comunidades negras oprimidas por todo el país. Sí, lo que parecía una queja aislada está creciendo exponencialmente.
Moviéndose en ese nuevo escenario, el grupo liderado por Irving y Bradley ha emitido un comunicado que ha hecho llegar a ESPN. La idea de la llamada coalición es dar voz a aquellos jugadores que temen represalias si expresan abiertamente sus preocupaciones, así como conseguir un plan más detallado de la NBA de cara a la vuelta de la competición en Disney World (Orlando). Dentro de las ‘exigencias’ de este grupo estaría la inversión de recursos e ideas de todas las circunscripciones de la liga, desde la oficina del comisionado pasando por propietarios, administración y Sindicato de Jugadores, para lograr una reforma en justicia social. Además, piden seguridad para los jugadores sobre posibles lesiones tras tres meses de inactividad. Así reza el comunicado:
«Somos un grupo de hombres y mujeres de diferentes equipos e industrias que normalmente son señalados como rivales, pero hemos dejado de lado nuestros egos y diferencias para asegurarnos de estar unidos y exigir honestidad durante este tiempo incierto».
«Hombres y mujeres indígenas nativos del Caribe y África que entretienen al mundo, continuaremos usando nuestras voces y plataformas para un cambio positivo y verdadero. Estamos realmente en un punto de inflexión de la historia en el que, como comunidad colectiva, podemos unirnos, UNIFICAR, y movernos como uno solo. Necesitamos a toda nuestra gente con nosotros y nos mantendremos unidos en solidaridad».
«Como comunidad oprimida, llevamos más de 500 años siendo objeto de ataques sistemáticos, haciéndose uso de nuestra propiedad intelectual, talento y siendo además asesinados por las mismas personas que supuestamente nos ‘protegen y sirven’. ¡HEMOS TENIDO SUFICIENTE!».
«Estamos combatiendo los problemas más importantes: no aceptaremos las injusticias raciales que continúan siendo ignoradas en nuestras comunidades. No nos mantendremos en la oscuridad en lo que respecta a nuestra salud y bienestar. Y no ignoraremos las motivaciones/expectativas financieras que nos han impedido históricamente tomar decisiones acertadas».
«No se trata de jugadores individuales, atletas o artistas. Se trata de nuestro grupo de hombres y mujeres fuertes que se unen para el cambio. Tenemos nuestras respectivas profesiones y ámbitos. Sin embargo, no solo nos callaremos y simplemente jugaremos para distraernos dentro de este sistema ha versado sobre: uso y abuso. Todos somos padres, hijas, líderes y mucho más. ¿Cuál es nuestro GRAN cuadro? ¡Estamos en esto por UNIDAD y CAMBIO!».
Ante tal demanda de soluciones o decisiones específicas de cara a la vuelta de la competición, la NBA y la NBPA se han puesto en contacto con los jugadores para encontrar un equilibrio entre la reanudación de la temporada y las peticiones de los propios jugadores. En todo caso, y según ha podido saber ESPN al contactar con diversas fuentes entre las que se incluyen jugadores, agentes y ejecutivos de la NBA, el regreso de la Liga a partir de finales de julio no corre peligro.
(Fotografía de Mike Stobe/Getty Images)