La polémica lleva acompañando a los Dallas Mavericks desde su penúltimo partido de temporada regular. En él, los texanos no dieron minutos a varios de sus jugadores más importantes y dejaron a Luka Doncic pisar la pista solo durante 12 minutos, una decisión que parecía tener el claro propósito de perder el encuentro para mejorar sus opciones de cara al draft y que ha sido muy criticada. No obstante, al parecer la franquicia consultó esta posibilidad a la liga antes de llevarla a la práctica para evitar posibles incidentes.
Así lo asegura el periodista Marc Stein, que afirma que hubo contacto entre los Mavs y la NBA antes de que se anunciara públicamente la decisión. Esto hace incluso más sorprendente el reciente informe de la liga en el que comunican que han abierto una investigación al respecto, pues esta información da a entender que Dallas recibió una especie de autorización indirecta para sentar a sus estrellas.
El choque se saldó, por supuesto, con victoria de los Bulls, lo que dejó a los de Kidd matemáticamente fuera de play-in y mejoró sus posibilidades de acabar con uno de los primeros 10 picks del draft, lo cual es relevante dado que, de no ser así, tendrán que enviar su ronda a los Knicks. Fueron muchos los que alzaron la voz al ver a un equipo desear perder de manera tan descarada cuando aún tenía posibilidades de clasificarse para la postemporada, pero, en defensa de los Mavs, no son ni mucho menos el único equipo en realizar este tipo de prácticas en las últimas semanas de competición. Aunque, eso sí, son quizás el que menos disimuladamente las ha llevado a cabo.
«Estábamos en una situación en la que nos jugábamos la vida, pero desde las oficinas cambiaron de decisión y tuvimos que seguir las pautas que nos marcaban» comentó Kidd cuando se le preguntó al respecto, prácticamente confesando que el objetivo no era ganar el partido. Es posible que este sea el motivo por el que la NBA ha abierto la investigación, llamando la atención ante la falta de discreción en un asunto tan polémico como el tanking.
(Fotografía de portada: Sam Hodde/Getty Images)