Los Houston Rockets y Avery Bradley han llegado a un acuerdo mutuo para que el jugador no continúe formando parte de la plantilla texana. La franquicia podría haberse asegurado su continuidad (o al menos tenerlo como activo para algún traspaso) ejecutando la player option de 5,9 millones de dólares recogida en su contrato, pero, según informa Shams Charania, periodista de The Athletic, ambas partes han decidido que lo mejor es no hacerlo.
Bradley llegó a Houston junto a Kelly Olynyk en el traspaso que terminó con Oladipo en Miami, pero lo cierto es que no es un jugador que encaje en el actual contexto de la plantilla. Los Rockets, especialmente tras dicho traspaso, se encuentran en pleno proceso de reconstrucción, mientras que el escolta, caracterizado por su buena defensa perimetral y su tiro exterior, se presenta como un perfil ideal para equipos con grandes aspiraciones. De hecho, el propio Charania asegura que ha despertado el interés de varios contenders, así como de franquicias por las que ya ha pasado, por lo que se espera que su nombre sea bastante recurrente en los próximos días con la apertura de la agencia libre.
Con todo, el escolta viene de una temporada bastante discreta, ya que sus problemas físicos le impidieron destacar en los Heat y el posterior cambio de aires le envió un equipo que no peleaba por nada y al que no tenía demasiado que aportar. Avery sí fue, no obstante, una pieza muy importante en los Lakers de la temporada 19-20, aunque no lo fue concretamente en los playoffs y en la lucha por el anillo ya que no acudió a la burbuja de Orlando por motivos familiares. Veremos qué equipo consigue hacerse con sus servicios y si termina siendo un hombre tan importante como cabría esperar dadas sus virtudes.
(Fotografía de portada: Katelyn Mulcahy/Getty Images)