Hablar de Sacramento hace tiempo que es algo tedioso. Son casi dos décadas fuera de playoffs mientras han ido pasando jugadores, entrenadores y directivos que han sido incapaces de revertir la situación. Un año más el objetivo es el mismo; la cuestión es que tras tantos años de golpes ininterrumpidos, cuesta confiar en que por fin vayan a encontrar el camino.
Dejando de lado valoraciones, la realidad es que Monte McNair parece enfrentarse a un curso del todo o nada. El general manager está entrando en su último año de contrato con los Kings y hace tiempo que Sam Amick de The Athletic señaló que está en el punto de mira. ¿Traducción? Si lo alcanza la meta deseada, no continuará más allá del próximo verano.
Esa es justo la cuestión que le ha planteado Jason Anderson del Sacramento Bee. Tal periodista ha querido conocer el parecer del ejecutivo de cara a una campaña en la que parece entrar sin margen de error. McNair rechaza tal afirmación recalcando que su trabajo es el mismo de siempre: formar la mejor plantilla posible.
«No hay un mandato especial sobre ello. Siempre hemos tenido muy claro cuál es nuestro objetivo: queremos ganar partidos, queremos llegar a los playoffs y queremos quedarnos allí. No hay un mandato diferente este año para conseguirlo. Mi trabajo es construir, como ya he dicho en otras ocasiones, el mejor equipo posible para que esté en la cancha este año y los venideros», explica.
Es obvio que McNair no va a admitir que su futuro es los Kings está más que complicado. Pocas veces un ejecutivo entra en su último año de contrato sin acordar (o conversar) sobre su continuidad o salida de una organización. Sin duda necesita que Sacramento de un importante paso al frente. Para conseguirlo contará con De’Aaron Fox y Domantas Sabonis, quien llegó el pasado mes de febrero, como pilares del proyecto; al menos por ahora, ya que desconocemos si tiene intención de ser agresivo en el mercado, incluso metiendo en acuerdos a los dos mencionados jugadores. Sí, una vez más los Kings son una completa incógnita.