«Historia de una ida y una vuelta: por Bilb… por James Wiseman».
La vida profesional del número 2 del Draft 2020 ha sido un carrusel con bastantes más bajadas que subidas desde que atracó en la NBA cargado de expectativas y expectación.
Pero pronto demostró que era un adelantado a su tiempo; a su propio tiempo. Aún no era fruta madura. Y Steve Kerr, de quién se esperaba que fuera capaz de encontrarle rápidamente acomodo a su envergadura y talento en ambos extremos del parquet, fracasó. Porque lo que se impusieron fueron sus debilidades: mal posicionamiento, escasa lectura, languidez física y falta de intensidad.
Y sin embargo, ahí estuvieron los números: 11,5 puntos, 5,8 rebotes y casi un tapón en sólo 21,4 minutos dentro de unos Warriors que aún buscaban el cuarto anillo de su dinastía. Pero cuando este llegó, el pívot no pudo sentirlo como algo propio; un desgarro de menisco le había dejado fuera quince meses y su situación en La Bahía entró en barrena hasta el punto de salir traspasado a Detroit Pistons, confirmando días después Joe Lacob –uno de sus mayores fans– que el timing jamás fue el adecuado: no tuvo oportunidad.
Detroit, con una pintura superpoblada, tampoco era el destino ideal, y a pesar de ello los números volvieron a estar ahí (12,7 puntos, 8,1 rebotes en 25,2 minutos).
Entonces, aparecieron los Indiana Pacers dispuestos, en plena desbandada de acólitos, a entregarle su fe.
Pero la lectura duró un versículo; y directos al réquiem.
Wiseman se volvía a romper y esta vez lo hacía a lo Gordon Hayward: el día de su debut en partido oficial. El Aquiles, una lesión que empieza a tener nevera de refrescos propia en Indianápolis.
De regreso al tren con una sonrisa
Digerido el varapalo los Pacers tiraron por la senda del pragmatismo y lo traspasaron a los Toronto Raptors para así poder ahorrarse el impuesto de lujo, pero la vida da tantas vueltas que, perdido Myles Turner y ante la que se antoja una temporada de transición para los subcampeones, han decidido confiar otra vez en él y darle una nueva oportunidad a un chico de 24 años al que sólo necesita que la suerte, no ya le sonría, sino que deje de darle la espalda.
Dos años por 5,69 millones de dólares (primer año parcialmente garantizado, segundo con opción de equipo, indicó Mike Scotto para Hoopshype) que, en base al clausulado, el center tendrá que ganárselos donde él más ansía: en el interior del rectángulo.
James Wiseman put pen to paper today ✍️ pic.twitter.com/LTabWWK16p
— Indiana Pacers (@Pacers) July 7, 2025
(Fotografía de portada de Trevor Ruszkowski-Imagn Images)