No pudo regresar mejor. Tras haberse perdido once partidos por una contusión en su rodilla derecha, Rudy Gobert estuvo de nuevo en cancha para ayudar a los suyos a lograr una nueva victoria, esta vez de manera aplastante por 116-69 ante los Wizards.
El pívot francés, con limitación de minutos para no sobrecargarle, pudo contribuir con 4 puntos y 10 rebotes en los 21 minutos que estuvo presente. “Hemos aprendido cómo jugar juntos, y cómo hacerlo bajo un estilo que se caracteriza por conducir y mover rápido la bola. No hay un solo jugador que tenga la bola todo el tiempo de posesión. Siempre la estamos moviendo y los rivales no saben cómo defender eso”, explicó Gobert, que también añadió haberse sentido bien ese tiempo que estuvo en pista.
Los Jazz, que siguen dando guerra en el Oeste, tuvieron a Alec Burks a su hombre más destacado con 27 puntos; de hecho, es el tercer partido consecutivo en el que consigue llegar como mínimo a los 20 tantos. Donovan Mitchell acabaría con 21 puntos en su haber.
“Hemos jugado realmente bien”, sentenciaba el entrenador, Quin Snyder. “No sé si ha sido el mejor partido, pero fue realmente bueno. Hemos estado bien en ataque, disciplinados en defensa, lo que nos ha dado un buen rendimiento a ambos lados de la pista”.
Bochorno para los Wizards
El equipo capitolino no quiso buscar excusas para explicar lo sucedido. Más que nada porque no las había. Leer a Scott Brooks da buena idea de la impotencia que sintió el técnico al ver el partido que cuajaron los suyos: “Nos han golpeado una y otra y otra vez. Y lo más sorprendente es que no hemos plantado batalla. Es una de las primeras veces en las que, desde que estoy aquí, nos hemos plantado cara”.
Sin el lesionado John Wall, los Wizards pierden la mitad (como mínimo) de sus opciones de arrancar triunfos, y si encima unimos a ello los porcentajes de ayer en el tiro – 28,8% en lanzamientos de campo y un 20% en el triple –, la tarea se convierte casi en un imposible.