Era 15 de octubre cuando se confirmaba que Seth Curry sería baja para el inicio de la temporada regular. En aquel momento no saltaron las alarmas con su tibia; es más, se hablaba de una ausencia que podía quedarse en una semana. Pues bien, estamos a 6 de febrero y Adrian Wojnarowski de ESPN adelanta que no jugará en lo que resta de temporada; es decir, no disputará un solo minuto en el curso 2017-18.
La causa de su ausencia permanente es esa misma lesión en la tibia que parecía no ser grave. Sin poder saltar a pista en los últimos tres meses y medio, los servicios médicos han decidido que la mejor opción para el escolta es pasar por el quirófano. Su recuperación se estima en unas 12 o 14 semanas.
Con el mencionado calendario Curry no tendría problemas para estar recuperado de cara a la próxima agencia libre que se abre el 1 de julio. Es algo a tener muy en cuenta, ya que será agente libre sin restricciones y deberá conseguir que los equipos interesados confíen en su físico.
En el peor momento
Jugando únicamente cuatro partidos en sus dos primeras temporadas en la Liga, Seth empezó a despuntar con Sacramento y explotó en Texas para irse hasta los 12,8 puntos de promedio con un 42,5% en triples. Con ese desempeño se podía vaticinar una interesante carrera para Curry. Ahora, con todo un año en blanco, vuelven las dudas.