El camino de rosas que se podía vaticinar cuando los Nets adquirieron a James Harden para unirle a Kevin Durant y Kyrie Irving no está siendo tal. La temporada ha discurrido con continuos baches en forma de bajas para los de Brooklyn. La retirada repentina de Lamarcus Aldridge o la ausencia indefinida de Spencer Dinwiddie desde diciembre se han sumado a los continuos achaques sufridos por sus tres jugadores estrella. Su aciaga racha se ha prolongado en playoffs con la lesión de Harden cuando apenas se habían jugado cuarenta segundos de las semifinales del Este y la más reciente preocupación por el tobillo de Kyrie Irving. Por suerte, parece que la Barba «progresa adecuadamente» de su lesión, según ha dicho Steve Nash.
Harden se ha perdido ya tres partidos al completo que se podrían considerar como cuatro. El 2-2 que ha forzado Milwaukee en la eliminatoria hace saltar las alarmas en Brooklyn, pero Nash prefiere mantener la calma. Aunque le vea progresar, ha dejado claro que no va a forzar su vuelta. «Si está listo para el siguiente partido, bien. Si no, no jugará. No quiero correr riesgos». La situación de los Nets es delicada, pero en la franquicia piensan que pueden seguir compitiendo a pesar de las ausencias de Irving y Harden. De hecho, la otra noticia que ha dado hoy la organización es la posible vuelta de Dinwiddie, al que se ha visto trabajar a pleno rendimiento en el gimnasio.
El quinto partido de la serie entre Brooklyn y Milwaukee se jugará en la madrugada del martes al miércoles en España. Ahora mismo, a la espera de más actualizaciones, no podría haber más incertidumbre en el entorno neoyorquino.
(Fotografía de portada de Elsa/Getty Images)