Will Hardy ya trabaja oficialmente como entrenador jefe de los Utah Jazz tras arrancar el ‘training camp’, fecha que establece el comienzo de una nueva temporada en la NBA. Después de firmar un acuerdo con la franquicia para las próximas cinco temporadas a finales del pasado mes de junio, el técnico reconoció que los últimos meses han sido un auténtico torbellino.
«Ha sido realmente emocionante comenzar a conocer al equipo, la ciudad, mudar a mi familiar aquí,…», señaló Hardy en el Media Day del equipo. «Ha sido increíble. Me siento ahora mucho más tranquilo que hace dos meses. Estamos todos listos para empezar a trabajar.»
Nada más cerrar su incorporación con los Jazz, en la que será su primera experiencia como entrenador jefe en la NBA, Hardy ya adelantó los tres pilares básicos sobre los que construiría la identidad del nuevo proyecto: dureza, sacrificio y pasión. Ahora, con la plantilla casi finiquitada y los jugadores a su disposición, el técnico comenzará a trabajar para dar forma real al equipo y al juego del mismo.
«Son un grupo realmente enérgico. Diría que hay una dureza colectiva», afirmó Hardy. «Tenemos muchos muchachos con ganas de reivindicarse. Creo que es realmente poderoso tener muchachos que son así de competitivos y que sienten que tienen algo que hacer y demostrar.»
Sobre los fundamentos a tratar durante el campo de entrenamiento, el head coach aportó diversas pinceladas sobre cómo será el sistema de los Jazz, tanto en ataque como en defensa. «Me gustaría que juguemos con un estilo en el que todos estén involucrados. No creo que sea productivo que un jugador absorba demasiado balón en este grupo», mencionó Hardy respecto a la ofensiva. Previamente, el técnico ya había avisado que buscaría un juego con mayor ritmo, circulación de balón y juego off-ball.
En defensa incidió en la necesidad de ser duros y de jugar con energía e intensidad. «Este equipo será representativo de esta organización y será algo que se reflejará en la base de aficionados. Seremos duros y jugaremos con pasión», sentencia.
En todo caso, Hardy ha reconocido que todavía no tiene una idea clara de cuál será la rotación del equipo y que no será hasta la conclusión de la pretemporada cuando pueda esbozar los primeros sistemas a ejecutar. «Cuando las cosas cambian es nuestra responsabilidad adaptarnos y ser flexibles, enfocarnos en quién está aquí y qué tenemos. Creo que el ‘training camp’ nos dirá mucho sobre nuestro equipo. Esa es una de las razones por las que estoy muy ilusionado con este campus. Tenemos muchos jugadores talentosos y queremos ver cómo se desempeñan.