Muchas semanas en una burbuja aislada del mundo con el baloncesto como única meta dan para mucho. Algunos jugadores han dado el salto a YouTube para contar sus vivencias, otros buscan entretenerse como pueden, y en caso de Jimmy Butler parece que ha tenido tiempo de montar su propio negocio de venta de cafés.
Hace unos días el alero de los Heat afirmaba en tono jocoso que iba a empezar a cobrar una comisión a quienes quisiesen usar su cafetera, y lo que parecía una broma ante la prensa ha empezado a tomar forma. Gracias a una publicación de Meyers Leonard en redes sociales ha podido conocerse la forma en que Jimmy ha empezado a sacar beneficios a un grupo de jugadores somnolientos en un entorno en el que, por lo que se deduce, no se sirve el mejor café del mundo.
Para empezar, todo a 20 dólares, tanto el pequeño como el mediado y el grande. No queda claro si Butler quiere sobreestimular a sus compañeros o si simplemente se trata de un excelente dominio de las leyes de oferta y demanda, pero ha conseguido que el vaso grande parezca incluso barato en comparación a las otras opciones. Además, permite solo el pago en efectivo, aclara que no se emiten pagarés, ofrece una enorme variedad de bebidas y, como colofón final, añade dos caras sonrientes. El ABC del éxito empresarial.
Con todo, esto parece haber traído algo de suerte a los Heat, que se impusieron a los Indiana Pacers en el primer encuentro de la serie entre ambos equipos. De hecho, Butler llegó al pabellón mostrando uno de su vasos de café a la prensa, convirtiendo así la bebida en un pequeño talismán.
Veremos si esta noche, con la llegada del Game 2, hay un nuevo guiño a esta curiosa situación.
(Fotografía de portada: Pool/Getty Images)