Para quien no lo supiera, LeBron James es, desde el año 2011, accionista minoritario del Liverpool, vigente campeón de la Premier League de fútbol y también, todavía, de la Champions League.
El jugador de los Lakers adquirió un paquete de acciones no mayoritario por un precio de 6,5 millones de dólares entonces, y diferentes informaciones apuntan que el valor de ese montante adquirido podría haberse multiplicado por seis en este momento. No en vano, el Liverpool ha cosechado numerosos títulos desde que LeBron llegara al accionariado hace casi una década.
Bien, pues desde hace algunos meses, concretamente desde enero de 2020, el club inglés había adelantado que su nuevo proveedor deportivo sería Nike. Dejaban de confiar su piel a New Balance y firmaban con una de las gigantes más importantes en la industria del deporte. Sobre todo en Estados Unidos y también en casa de LeBron, pues Nike es la firma que lleva a la estrella de los Lakers.
En la mañana de este miércoles, el Liverpool dio a conocer sus nuevas equipaciones para la temporada 2020-21, ya embutidas con el logo de Nike. Y a LeBron le pareció oportuno celebrarlo paseando su propio modelo dentro de los límites de la burbuja NBA.
Es hasta posible que ahora que Nike viste al Liverpool, LeBron James pueda relacionarse más de manera pública con los colores del campeón británico.
Tranquilidad absoluta la de James estos días en Florida. Sus Lakers aseguraron la primera plaza de la Conferencia Oeste de manera reciente, la primera que sucede eso desde hace diez años. De su mano y de la de Anthony Davis, el equipo púrpura y oro vuelve a reinar en el lado pacífico del mapa.
(Fotografía de portada: Twitter Lakers)