Han pasado menos de 48 horas desde que Ben Simmons anunciase a los Sixers que no se presentará al training camp del equipo hasta que se materialice su salida. Desde entonces, las operaciones y rumores han corrido como la pólvora y la situación ya comienza a despejarse. Si el jugador sigue pretendiendo jugar en california, la caída de los Warriors como posible destino le deja un abanico de oportunidades bastante reducido. Por no decir que o acaba en Sacramento o que se vaya olvidando de vivir en la península.
Golden State ha sido uno de los equipos involucrados desde el inicio del mercado en los rumores sobre el australiano. Sus piezas a la venta eran el pack de elecciones que terminaron ejerciendo sobre Kuminga y Moody, y la posibilidad de añadir a James Wiseman. Sin embargo, las ambiciones peticiones de Daryl Morey descartaron cualquier intento por parte de los de San Francisco, quienes no se han visto afectados por los recientes acontecimientos. Draymond Green sigue sin estar en venta. Así lo aseguraba Monte Poole en su último texto para la NBC, en el cual subraya que los Warriors no están interesados en sumar a Simmons a una plantilla que ya cuenta con Green. Dicha negativa deja a Golden State fuera de la puja mientras equipos como Minnesota y Toronto toman la delantera.
(Fotografía de portada de Rob Carr/Getty Images)