Pese a jugar diez temporadas en la élite del baloncesto mundial como jugador indiscutible en todos sus equipos, Gordon Hayward nunca ha disputado una campaña completa. Las lesiones, especialmente durante su última etapa vestido de verde, le han pasado factura. Así, a sus 30 años y con una rotura en la tibia y el tobillo, el alero de los Celtics puede estar buscando este verano un contrato a largo plazo para asegurarse su continuidad en la NBA.
Según informa Ryen Russillo de ESPN, el jugador nacido en Indiana rechazará la opción de jugador que dispone para la siguiente temporada, superior a los 34,2 millones de dólares. Esto lo haría con la finalidad de salir al mercado y ver las diferentes ofertas que le planteen durante la agencia libre. Hayward estaría buscando una firma por más temporadas garantizadas. En el caso de tomar esa player option se arriesgaría a completar una mala temporada y convertirse en un agente libre mucho menos atractivo a sus 31 años.
Una opción para el ex de los Utah Jazz sería aprovechar la situación salarial de algún equipo en reconstrucción y firmar una buena cantidad a la larga. En este caso, los candidatos serían franquicias como los Atlanta Hawks, los New York Knicks o los Detroit Pistons, equipos con poco comprometido para los años venideros debido a la gran cantidad de contratos rookies que tienen. No obstante, también podría buscar otros proyectos más estables por una cantidad inferior o vía sign-and-trade.
Incluso cabe la posibilidad de que los propios Boston Celtics se planteen renovarle cumpliendo sus demandas contractuales. Una opción factible vista la importancia de Gordon Hayward en la pizarra ofensiva de Brad Stevens. Este se ha mostrado como un desatascador frente a las diferentes defensas en estático que les han planteado en los momentos decisivos de la temporada. Es más, su equipo ha sufrido sin él en pista en este tipo de situaciones, siendo un perfil de jugador que no abunda en el mercado ni en el actual roster de los de Massachusetts.
Sin embargo, siempre hay que tener en cuenta que, en cuanto a la anotación, no es una de las primeras opciones en su equipo. Durante su estancia en Boston, jugadores como Jayson Tatum, Kemba Walker, Jaylen Brown e incluso Marcus Smart le han quitado galones. Un factor que tanto los Celtics como el propio jugador tendrán en cuenta si se sientan a negociar.
(Fotografía de portada de Mike Ehrmann/Getty Images)