«No salgáis con Joakim Noah». Ese es el mensaje que transmitió New York Knicks a sus jóvenes jugadores tras contratar al pívot francés. Suena duro, pero según informa Stefan Bondy de New York Daily News, así es.
Pese a que en la Gran Manzana decidieron firmarle en 2016 cuatro años y 72 millones de dólares, parece que en la gerencia no estaban del todo convencidos, o al menos pensaron que no debía ser quien guiase al resto del equipo fuera de las canchas.
No se trata de una sorpresa, al menos no tras escuchar a Noah insinuando que la ‘mala vida’ le impidió triunfar en Nueva York. Según el francés, su personalidad no estaba preparada para vivir la el desenfreno de ‘la ciudad que nunca duerme’ a la vez que se preparaba para jugar. Por ello, explica, Memphis es un gran destino para él.
Declaraciones como las suyas, unidad al hecho de que desde la misma gerencia se tuviese dudas de su trabajo más allá de las instalaciones del equipo, no hace sino aumentar el dolo ante la que fue una contratación nefasta.
(Fotografía de Streeter Lecka/Getty Images)