Los Brooklyn Nets solicitarán la ‘disabled player exception’ después de confirmarse la baja de larga duración de Spencer Dinwiddie. El jugador ha pasado por el quirófano para reparar el desgarro parcial del ligamento cruzado anterior en la rodilla derecha sufrido hace una semana en el partido contra los Charlotte Hornets y no jugará lo que resta de temporada.
Una vez otorgada, la franquicia neoyorquina dispondrá de 5,7 millones para adquirir a un jugador hasta final de campaña. Eso sí, con dos consideraciones previas. Primero deberán liberar un hueco en el roster. Posteriormente, asimilar que este nuevo contrato disparará el impuesto de lujo esta temporada hasta los 43 millones, tal y como ha informado el periodista Adrian Wojnarowski.
Dinwiddie se había convertido en una pieza importante para Steve Nash partiendo desde el quinteto inicial. Casualidad o no, lo cierto es que los Nets han perdido tres de los cuatro partidos que han disputado desde la lesión del guard. El técnico todavía no ha conseguido corregir este déficit y el bajo rendimiento de Caris LeVert ha incidido en las necesidades de reclutar una nueva pieza.
De momento se desconoce qué jugadores baraja la gerencia pero algunos medios de comunicación y antiguos jugadores de la NBA sugieren que Jamal Crawford podría estar en el radar.
(Fotografía de portada de Harry How/Getty Images)