Sin lugar a duda, los Houston Rockets son el equipo que peor parado ha salido de la burbuja de Orlando. Pese a ser una de las plantillas más arrasadoras y talentosos de los últimos años, sus crisis internas y su sistema extremista han hecho estallar su proyecto deportivo. Una situación que su anterior general manager ya intuía y por lo que posiblemente se marchó rumbo a Philadelphia. Actualmente, los tejanos se encuentran con muchos jugadores demandando su salida y obligados a reconstruir.
Rafael Stone tendrá un papel más que importante en todo lo que ocurra, ya que tanto Russell Westbrook como James Harden han manifestado la voluntad de marcharse. El problema, es que al gerente de los Rockets le está costando mucho encontrar una oferta interesante por el que fuera base de los Thunder. Esto podría ser un impedimento para la marcha de La Barba, pues tal y como afirma Chris Mannix, en Houston no están dispuestos a mover a James Harden antes que a Russell Westbrook.
Por cuestiones evidentes, el mercado de los Rockets se complicaría mucho si traspasarán antes al MVP de 2018, ya que el valor de Westbrook ha caído en picado tras su nefasta actuación en los playoffs. Su impulsividad y su escaso acierto en el tiro exterior han hecho que tan solo los Knicks y los Hornets se interesen en él. En ninguno de los casos han incluido primeros rondas o jugadores de futuro en sus ofertas, por lo que estas han sido declinadas ya que buscan reconstruir. De hecho, la más interesante podría ser la de los de Charlotte, pues al menos se librarían de un contrato (el de Batum) de 27 millones para el verano que viene y no arrastrarían contratos tóxicos a largo plazo.
Por su parte, la marcha de James Harden parece estar más encarrilada y sus posibles destinos son más que conocidos. Tanto los Nets como los Sixers están altamente interesados en sumar a uno de los mejores talentos ofensivos de la NBA. No obstante, queda por ver quien ofrece un pack más interesante para los tejanos. Se ha rumoreado que ambos podrían incluir a jugadores de la talla de Ben Simmons o Kyrie Irving, lo que les facilitaría una figura sobre la que construir los nuevos Rockets.
(Fotografía de portada de Mike Ehrmann/Getty Images)