La temporada de Los Angeles Clippers ha llegado a su fin después de culminarse su eliminación a manos de Phoenix Suns en el sexto partido de las Finales del Oeste. Una decepción que marca el inicio de otro periodo igualmente de apasionante: la temporada baja y, con ello, los rumores alrededor de algunos de los principales nombres que componen la liga.
En el caso de los Clippers, la situación de Kawhi Leonard es la que mayor expectación generará en los próximos meses. Y preocupación dentro de una franquicia que ha construido sobre él un potente proyecto que, de momento, no ha podido alzarse con el campeonato, por uno u otro motivo.
Lo cierto es que el cinco veces All-Star podría salir a la agencia libre este verano en caso de rechazar su opción de jugador por valor de 36,0 millones de dólares. Un escenario que el habitual hermetismo que rodea a su entorno no hace más que impulsar. Así, no es de extrañar que algunas franquicias se hayan posicionado ya de cara a pujar por sus servicios.
Según una información procedente del periodista Kevin O’Connor, Dallas Mavericks y Miami Heat son dos de las franquicias que mayor esfuerzo estarían dispuestas a realizar para incorporar a Leonard. Ambos equipos tienen la posibilidad de liberar bastante espacio salarial si juegan bien sus cartas, por lo que el aspecto económico no supondría un hándicap a considerar.
Deportivamente también se erigen como opciones suculentas. A pesar de haber caído eliminados en primera ronda de playoffs a manos de Clippers y Bucks, respectivamente, estos dos proyectos presentan una base más que sólida a la que solo les hace falta una vuelta de tuerca más para codearse entre los contenders.
A mayores, O’Connor apeló a la buena relación existente entre Kawhi Leonard y Nico Harrison, nuevo general manager de los Mavericks, como plus para la organización afincada en Dallas.
Cualquiera que sea el equipo que finalmente asegure su presencia, este emergerá inmediatamente como gran candidato para conquistar el título de campeón de la NBA en 2022.
(Fotografía de portada de Kevork Djansezian/Getty Images)