La estrella de los Chicago Bulls, Zach LaVine, ha expresado en diversas ocasiones que le encanta jugar en La Ciudad del Viento. A pesar de que el equipo no ha logrado clasificarse para el play-in incluso después de haber cerrado una operación por Nikola Vucevic, el escolta mantiene su deseo de abrazar el éxito allí. Aunque no a cualquier precio.
Diversas informaciones que han surgido durante la última semana han sugerido que el jugador estaría dispuesto a rebajar sus pretensiones económicas para favorecer la llegada de mejores refuerzos para el equipo. Finalmente parece que no será así.
El de Renton señaló para el medio NBC Sports «que adora estar en Chicago» pero aclaró que «esto es un negocio» y que querrá cobrar lo que se merece.
LaVine aspira este verano a recibir una extensión de contrato que no alcanzaría el máximo. Sin embargo, en la agencia libre de 2022 podría firmar un acuerdo superior a los 200 millones de dólares repartidos en cinco años. Una opción que satisfaría sus deseos de obtener la mayor cantidad de dinero posible.
El jugador ha completado una sensacional campaña para los Bulls, promediando los máximos de su carrera en anotación (27,4), rebotes (5,0), asistencias (4,9) y acierto en triples (41,9%). Unos números que le sirvieron para firmar su primera aparición en un All-Star Game.
A los Bulls les espera un verano bastante movido. La intención es rodear con las mejores piezas posibles a LaVine y Vucevic para seguir construyendo el camino hacia el éxito. Por lo tanto, parece que el All-Star deberá de esperar hasta el verano de 2022 antes de recibir su nuevo cheque de pago.
(Fotografía de portada de Jonathan Daniel/Getty Images)