Han pasado muchos años. Algunos puede que no se acuerden. Pero hubo un tiempo en el que Steve Nash era el base titular de Dallas Mavericks.
El que posteriormente fuese dos veces MVP con Phoenix Suns –equipo que le seleccionó en el draft de 1996–, vivió su despegue como point guard puntero de la NBA en Texas, donde enlazó dos temporadas (2001-02 y 2002-03) jugando los 82 partidos de regular season y promediando 17,5 puntos y 7,5 asistencias.
Buenos números sí, pero no suficientes para Mark Cuban, quien al llegar el verano de 2004, momento en el que su jugador era agente libre, no puso impedimento para su marcha. Hoy, 16 años después, califica esa decisión como su mayor error al mando de los Mavs.
«Ciertamente no le veíamos como un ‘dos veces MVP’. Ese ha sido el mayor error que he tenido, no volver a firmarle. Pensamos que físicamente no aguantaría y lo hizo. Fue un mal consejo», expresa en declaraciones recogidas por Fort Worth Star-Telegram.
Lo que vino después
De 2004 a 2012 –hasta que su físico aguantó– el base canadiense fue enlazando clases magistrales de baloncesto en Arizona. Si ahora se acuerda Cuban de aquello, no quiero imaginar cómo se sentiría hace años. En todo caso, nunca sabremos si hubiese explotado de igual manera en Dallas, ya que parte de lo que fue estuvo marcado por Mike D’Antoni y su estilo de juego.