Para muchos jugadores de la NBA, visitar dos plazas con tanta historia como el Madison Square Garden y el TD Garden de Boston es una cita especial. Incluso un veterano de 38 años y salido de mil batallas como Dirk Nowitzki así lo reconoce. Asumiendo que no quedarán muchas más ocasiones en las que podrá jugar en ambos pabellones, especialmente jugando en la Conferencia Oeste, Dirk Nowitzki apunta a principios de la próxima semana para poder regresar a las canchas, con sus Mavericks visitando a Knicks el lunes y a Celtics el miércoles.
Nowitzki, fuera de combate por una distensión de tendón de Aquiles, declaró a ESPN que su lesión «ha mejorado, pero no he podido hacer demasiado todavía. Hoy ha ido bien, pero no estuvimos cerca de apretar al máximo. Sencillamente me he empezado a mover un poco en la cancha». El veterano ala-pívot alemán, de 38 años, solo ha disputado tres partidos esta temporada por culpa de sus problemas físicos. Tras reaparecer el 2 de noviembre ante Utah, los Mavs tuvieron que apartarle dos días después para darle más tiempo de recuperación.
Esperando a su estrella
«No queremos precipitar nada y volver a donde estaba la pasada semana», afirmó Nowitzki. «Así que si siento algo este fin de semana, van a volver a tomárselo con calma. Obviamente quiero jugar en el Garden el lunes y quiero jugar en Boston, dos de mis lugares favoritos a domicilio. Pero no sé en este punto si va a ocurrir».
Tras un mal comienzo de temporada (actualmente son penúltimos del Oeste con un balance de 2-6), los Mavericks necesitan recuperar al mejor Dirk Nowitzki para no perder demasiado pronto el tren de los Playoffs. La parte positiva para Dallas es tener cinco días de descanso entre su último partido, el miércoles ante Golden State, y su siguiente cita en New York. Buen momento para acumular energía, con la esperanza de contar con su eterna estrella una vez más.