Kevin Durant vuelve esta noche a Oklahoma City. Como sabemos más que de sobra, su salida del equipo estuvo cargada de polémica, críticas y también enfado por parte de los que fueron sus aficionados durante tantos años. Ante ese escenario, el jugador y su business manager, Rich Kleiman, han decidido tomar una serie de medidas y van a contratar seguridad extra para afrontar este encuentro de alta tensión.
Según ESPN, un equipo de seguridad armado estará con los Warriors en todo momento, triplicando la cantidad de miembros de seguridad que normalmente viajan con los de Oakland. Una parte de ese contingente tendrá como misión garantizar que todo discurre con normalidad durante el mismo encuentro, evitando así cualquier posible conflicto.
Además, al tratarse de un back-to-back para los de Steve Kerr, los Warriors no realizarán sesión de tiro horas previas al partido, aunque tampoco Durant «estará encerrado en su habitación del hotel», tal y como informaba una fuente cercana al jugador.