Fue todo un susto. El rookie de los Bobcats Michael Kidd-Gilchrist tuvo que ser retirado en camilla tras chocar con su compañero Jeff Taylor cuando ambos intentaban taponar la entrada a canasta de Toney Douglas. En el salto, Taylor golpeó fortuitamente a Kidd-Gilchrist en la cabeza, y éste cayó desplomado al suelo, quedándose inconsciente durante unos minutos.
Rápidamente el personal médico le atendió, y fue colocado en una camilla con un collarín. Posteriormente sería trasladado a un hospital local, donde estará en observación las próximas horas. El entrenador Mike Dunlap dijo después del partido que Kidd-Gilchrist podía mover las piernas y hablar con normalidad mientras estaba siendo trasladado al hospital. En un comunicado oficial, los Bobcats han aclarado que ya se le han hecho diferentes pruebas para descartar una lesión en su cabeza o cuello.
“Yo no ví nada. Todo pasó muy rápido”, comentó Taylor, quien escuchó a Kidd-Gilchrist hablando con el personal médico, aunque no pudo hablar directamente con él.