Desde la pasada semana se han ido sucediendo diferentes declaraciones individuales de cara al draft 2020. Es imposible conocer cuándo podrá celebrarse, pero los talentos más emergentes ya deshojan la margarita para no quedarse sin una potencial porción del pastel. Desean que su nombre haga correr ríos de tinta, dándose a conocer en la mayor medida posible.
Desde que los nombres pertenecientes a la clase del 2020 empezaron a sonar, una creencia gana enteros entre quienes observan los movimientos de los aspirantes: Anthony Edwards, jugador de la Universidad de Georgia, emerge como el talento más destacado.
Portales de predicción, como ESPN o NBAdraft.net, sitúan al escolta como el proyecto con más opciones de resultar número uno. Sea cuando sea la ceremonia.
Hablamos de un jugador prácticamente total. Un combo guard que por condiciones puede también dirigir perfectamente el ataque como base principal. No encuentra problemas para anotar con facilidad (19,1 de promedio en su curso freshman en Georgia) y también es rápido, explosivo y con tendencia a imponer superioridad física. Lee bien situaciones de ataque penetrando a canasta y también jugando en pick and roll. Además, reúne talento para poder mirar a canasta de manera indistinta tras botar o en estático. Vamos, que anda sobrado desde la circunferencia ofensiva.
Como asignatura pendiente tiene todavía, entre otras cosas, el triple (29,4 por ciento en Georgia), o sus artes defensivas.
Edwards fue de los primeros en anunciar su viabilidad para el draft 2020 pero no necesariamente por ello es quien más fuerte está sonando. Sus cualidades apuntan realmente a potencial número uno del draft.
Y qué pasa con Wiseman
Otros portales especializados en la materia, como Tankathon o NBC, sitúan a James Wiseman (pívot) por delante de Edwards. El tercer jugador que suele completar los primeros lugares en las diferentes quinielas es LaMelo Ball, el ‘hermanísimo’ que va no siéndolo tanto según avanzan su carrera y condiciones.
Otros jugadores como Obi Toppin, Onyeka Okongwu, Deni Avdija o Killian Hayes, que se declaró elegible este mismo viernes, también son prácticamente fijos en los primeros lugares de cualquier mock.
Seguramente, la diferencia entre quién será número uno y número dos se encuentre en la franquicia que emita la elección. Dado que tanto Wiseman como Edwards pertenecen a demarcaciones opuestas, si la necesidad de la entidad en cuestión aprieta por un jugador interior, será más probable que apuesten por el ex de la Universidad de Memphis.
En cambio, si la franquicia con la pole va bien cubierta por dentro, Edwards podría resultar una mejor opción.
Recordemos que James Wiseman abandonó esta temporada la NCAA después de que esta le sancionara con 12 partidos de suspensión debido a unos supuestos pagos indebidos (cerca de 12.000 dólares). El joven pívot no aceptó que la competición colegial no admitiera sus recursos a semejante acusación y, por tanto, abandonó su periplo universitario con solo tres encuentros disputados (promedios de 19,7 puntos y 10,7 rebotes).
Hay que destacar también que James Wiseman partía con mayores opciones de ser número uno a comienzos de la temporada 2019-20. Sin embargo, en este momento las opciones de Edwards parecen ligeramente por delante, según la voz de los portales especializados.
De ese modo, Edwards, Wiseman y, parece que en menor medida, Ball son los grandes candidatos a estrenar el draft 2020. En el caso de LaMelo, que dejó unos muy potables números en Australia (17,0 puntos, 7,6 rebotes, 6,8 asistencias), muchas franquicias quieren asegurarse primero de que su padre, LaVar, se ha relajado varios puntos antes de apostar por su talento.
Así, para vosotros, lectores, merece Anthony Edwards el creciente cartel de mejor proyecto de la generación venidera o tiene a James Wiseman (o a quien sea) por delante?
(Fotografía de portada: Carmen Mandato/Getty Images)