Ante el inminente comienzo de un nuevo curso hacemos un repaso a los 30 equipos de la competición de cara a la temporada 2017-18 NBA. El campeonato de los Warriors y la confirmación de que Golden State será una potencia durante varios años ha conllevado que numerosos equipos hayan realizado grandes apuestas durante el verano y otros hayan optado por dar un paso atrás.
Houston Rockets
Balance 2016-17: 55-27 (3º Oeste, clasificado para playoffs).
Entrenador: Mike D’Antoni (2ª temporada en el equipo).
Agentes libres más importantes en 2018: Chris Paul, Trevor Ariza, Tarik Black, Luc Richard Mbah a Moute, Clint Capela, Tim Quarterman.
La plantilla
Altas: Chris Paul, Zhou Qi, Tim Quarterman, Shawn Long, P.J. Tucker, Tarik Black, Luc Richard Mbah a Moute, Cameron Oliver, Demetrius Jackson (two-way contract).
Bajas: Patrick Beverley, Sam Dekker, Montrezl Harrell, Lou Williams y Kyle Wiltjer.
Siguen: Ryan Anderson, Trevor Ariza, Clint Capela, Eric Gordon, James Harden, Nenê Hilario, Chinanu Onuaku, Isaiah Taylor, Troy Williams.
Así encaran la temporada
Es la hora de Houston. Si la pasada campaña realizaron un año sobresaliente, esta han hecho todo lo posible para obtener una matrícula de honor al finalizar el curso. Daryl Morey ha sacado su magia en los despachos para configurar una plantilla que asusta con solamente echar un repaso al listado de nombres que la componen, y ha logrado limar con finura los puntos débiles que arrastraron hace unos meses. Bien contento estará Mike D’Antoni, quien ha logrado subirse de nuevo al tren de la NBA siendo fiel a su estilo de juego y logrando que los Rockets se conviertan en uno de los equipos más atractivos de ver. El técnico está armado hasta los dientes de jugadores que encarnan su apuesta por la agilidad y el descaro.
La llegada de Chris Paul ha generado automáticamente que, si los Rockets ya eran candidatos para al menos molestar a los grandes contendientes, ahora hayan pasado al siguiente nivel de competitividad y sean uno de los grandes favoritos a hacerse con el anillo. Paul conformará con James Harden uno de los mejores tándems que hayamos visto en los últimos años; y aunque existan ciertas reticencias sobre si unir a ambos jugadores en cancha es lo más adecuado debido a sus similares perfiles, lo cierto es que es preferible agarrarse a la máxima de que nunca está de más juntar a los mejores. Porque ellos querrán y harán lo posible porque funcione. En ese ajuste, D’Antoni tendrá que trabajar para que sean menos las veces que Harden haga de point guard —aunque también esta condición puede suponer un arma que convierta a los Rockets en indetectables en ataque—. Harden, quien está en su total prime como jugador, tiene ante sí la oportunidad de volver a luchar por el MVP que ya rozó con los dedos el año pasado.
La capacidad de tiro que atesora Houston es espectacular. Sin duda, uno de los dos o tres mejores backcourts de toda la liga y llamados casi por obligación a liderar en anotación. Eric Gordon será de nuevo el líder de la segunda unidad, demostrando que los que le eligieron como Sexto Hombre del Año no vieron solamente un curso bueno; y Ryan Anderson o Trevor Ariza ejercerán como segundos espadas en noches en las que Harden y Paul necesiten un complemento a sus puntos y asistencias.
Aunque la defensa aún sea algo que mejorar, se han traído a jugadores con la experiencia de Luc Mbah a Moute o P.J. Tucker para subir las credenciales del equipo. En la pintura han de tener cuidado sobre cómo jugar sus cartas. Nene, Clint Capela y compañía deben dar un paso hacia delante cuando vengan los partidos complicados y toque proteger el aro como si no hubiera un mañana.
El jugador a seguir
James Harden. Aunque parezca que la llegada de un jugador con tanta experiencia y peso en la liga como Chris Paul pudiera parecer reclamo suficiente como para ser destacada, lo cierto es que el base viene a un equipo donde ya hay un súper jugador. Mejor dicho, donde ya hay un líder con el que tendrá que entenderse.
Harden ya lleva tiempo demostrando que su salida de Oklahoma City no tenía otra intención que enseñarle a todo el mundo que estaba hecho para ser un jugador franquicia. Uno de esos destinados a llevarse los titulares, los premios individuales y, por qué no, los colectivos. El escolta silenció cualquier duda que hubiera sobre él el año pasado, regalando al prójimo noches para el recuerdo y dando la sensación de que algo tan complicado como un triple-doble se podía conseguir con tremenda facilidad.
De su concurso penderán las posibilidades de los Rockets. Si las lesiones le respetan y el acierto le acompaña, Harden conducirá a los suyos por la carretera del Oeste con más kilómetros de la liga, donde estarán esperándole a buen seguro los Warriors. No podría ser de otra manera. Ni él se lo autopermitiría ni las expectactivas que rodean al equipo tampoco.
El pronóstico
Elio Martínez, director de nbamaniacs, dará un pronóstico personal y subjetivo sobre lo que cree que hará cada franquicia durante la temporada 2017-18.
Hay muchas ganas de ver de lo que son capaces los Rockets con Paul y Harden a la cabeza. Un duo exterior de tal calibre va a generar numerosas oportunidades y ventajas en el ataque de Houston y por lo poco que hemos podido ver en pretemporada D’Antoni va a abusar del triple hasta límites nunca vistos. Aunque no nos puede pillar de sorpresa: el curso pasado batieron el récord histórico de triples anotados en una temporada y sería extraño que en la 2017-18 no establecieran una nueva marca. Los Rockets están llamados a pelear el Oeste con Warriors, Spurs y Thunder, pero alcanzar las Finales de Conferencia ya sería un éxito teniendo en cuenta el nivel de esos cuatro equipos.
Anterior equipo analizado: Boston Celtics. Próximo equipo: San Antonio Spurs.