Ante el inminente comienzo de un nuevo curso hacemos un repaso a los 30 equipos de la competición de cara a la temporada 2017-18 NBA. El campeonato de los Warriors y la confirmación de que Golden State será una potencia durante varios años ha conllevado que numerosos equipos hayan realizado grandes apuestas durante el verano y otros hayan optado por dar un paso atrás.
Memphis Grizzlies
Balance 2016-17: 43-39 (7º Oeste, eliminado en primer ronda de playoffs).
Entrenador: David Fizdale (2ª temporada en el equipo).
Agentes libres más importantes en 2018: Brandan Wright, Tyreke Evans, James Ennis, Mario Chalmers.
La plantilla
Altas: Ben McLemore, Tyreke Evans, Mario Chalmers, Rade Zagorac (rookie), Jeremy Morgan (rookie), Ivan Rabb (rookie), Dillon Brooks (rookie), Vince Hunter (Two Way), Kobi Simmons (Two Way).
Bajas: Zach Randolph, Tony Allen, Vince Carter, Troy Daniels, Toney Douglas, Troy Williams.
Siguen: Mike Conley, Chandlers Parsons, Marc Gasol, JaMychal Green (todavía no oficial), Wayne Selden, Deyonta Davis, Jarell Martin, Andrew Harrison, Wade Baldwin, James Ennis.
Así encaran la temporada
Memphis levanta la persiana de luto. Lo hace por la marcha de Zach Randolph, jugador que desde el año 2009 había formado duo con Marc Gasol y con el que llegaron siete apariciones seguidas en playoffs. Los mejores cursos de la historia de la franquicia con una final de conferencia (2013), dos semifinales (2011 y 2015) y una identidad tatuada en la sangre —la hueste del Grit and Grind—; de todo eso tiene mucha culpa Randolph. Con su marcha, la organización dice adiós a una de las figuras clave de su historia. El veterano ala-pívot podría hasta ver su camiseta retirada allí (máximo reboteador histórico, mayor número de canastas, tercero con más partidos, tercero en puntos). Una leyenda en Tennessee.
Pero manda el presente y Memphis Grizzlies puede encajar como uno de los tapados esta temporada. A su favor, que nadie les espera siquiera en playoffs y podrían pelear perfectamente por los últimos billetes que dan derecho a jugar la postemporada. Para ello, Memphis necesita una nueva pata para la trinidad, que sustituya a Randolph, se entiende. Y el llamado a filas es Chandler Parsons. El alero (firmó un contrato cercano a los 25 millones por temporada en 2016) está ante la temporada de su confirmación: bien como gran jugador o como injusto amasador de fortuna económica.
Los Grizzlies cuentan con tres grandes contratos (Parsons, Mike Conley y Marc Gasol), y dos de ellos están entre los mejores 30 jugadores de la competición. Podría ser argumento suficiente para empujar al equipo a una buena temporada, sin embargo las dudas del equipo están en los actores de reparto. Se desconoce hasta qué punto pueden asumir aportación JaMychal Green, Ben McLemore, Tyreke Evans, James Ennis, Andrew Harrison y compañía. Pueden congregar una potable segunda unidad —más con el bolígrafo de Fizdale— pero también lo contrario.
Parece claro que Memphis posee argumentos para no buscar entre migajas en la Conferencia Oeste. No serán referencia, pero tampoco se arrastrarán. Menos con la cultura instaurada en los Grizzlies desde hace casi una década: siempre compiten, defienden como pocos, son serios y trabajan en formato incansable. El año pasado, el equipo de Tennessee fue la tercera mejor defensa de la NBA, por ejemplo. Y el colectivo siempre es grácil en inteligencia, intensidad y fiereza. Esa es, y seguirá siendo, la identidad de los Grizzlies; muy duros de ganar, aunque les ganes.
Donde más tendrán que ahondar, quizá, es en la versatilidad ofensiva; y ahí es donde Fizdale llevará meses con clases particulares a Parsons. Le necesitan tanto como deseen no reptar esta temporada por la liga.
No favorece tampoco que Marc Gasol haya sido objeto de rumores de una salida de Memphis desde hace meses. Por el momento —con los Celtics más relajados tras adquirir a Kyrie Irving—, Marc sigue como cabeza de proyecto y no hay más indicios sobre su posible marcha, aunque el español ya ha dejado la puerta abierta este verano a que haya un replanteo de la situación si la franquicia deja de aspirar a cotas altas.
Aunque puedan entrar en playoffs y cumplir un año muy digno, la sensación esta temporada para los Grizzlies apunta a que no van a seguir avanzando. Será el primer año de muchos en el que hasta ellos sabrán que difícilmente mejorarán lo conseguido en los últimos tiempos. Dejan de avanzar, al menos este curso, para encontrar su nuevo lugar en el competido Oeste. Pero siempre estarán ahí y serán un rival muy incómodo contra el que jugar. Eso es innegociable. Grit and grind en la oficina.
El jugador a seguir
Chandler Parsons. Es evidente que Marc Gasol y Mike Conley son las piezas franquicia y hombres importantes de Memphis Grizzlies. No obstante, en lo prolongado —o exiguo— del paso adelante de Parsons estarán muchas de las opciones del equipo. Si consigue entrar en la nueva trinidad de Memphis —algo más humanizada sin la dureza de Randolph— los próximos años de la franquicia pueden estar a salvo. De lo contrario su contrato se confirmaría como uno de los tres más tóxicos de la NBA.
El pronóstico
Elio Martínez, director de nbamaniacs, dará un pronóstico personal y subjetivo sobre lo que cree que hará cada franquicia durante la temporada 2017-18.
Parece que el único hueco por el que Memphis Grizzlies podría entrar a playoffs está situado entre la séptima y la octava plaza del Oeste, pero muy bien tendría que regresar Parsons de sus numerosos problemas físicos y de ritmo de competición como para que ese objetivo fuese real mas allá de enero. En teoría las dos últimas posiciones de playoffs del Oeste van a ser repartidas entre Trail Blazers, Pelicans, Jazz, Nuggets y Grizzlies; Memphis tendrá su oportunidad, pero deberá funcionar como un reloj para alcanzar las rondas por el título… Y que Conley o Gasol no se lesionen, claro.
Anterior equipo analizado: Atlanta Hawks. Próximo equipo: Oklahoma City Thunder.