Chris Paul fue protagonista del Game 4 del Finales, pero no del modo que le hubiese gustado. Mientras Devin Booker se exhibía llegando hasta los 42 puntos, el base All-Star viene una de sus noches más complicadas en los playoffs por su desacierto ofensivo, el cual le llevó no solo a fallar tiro, sino a perder hasta cinco balones (los mismos que los Bucks en conjunto). El partido acabó con derrota, y lo que podría haber sido un 3-1 casi definitivo se convirtió en un 2-2 que abre las puertas de par en par a Milwaukee. CP3 tiene claro que no es el escenario deseado, pero no por ello va a gastar ni un instante en pensar en lo pasado. Su mente está puesta en el quinto partido, en ganar y en dar un nuevo paso hacia el primer anillo de su carrera.
«Lo ocurrido es algo en lo que no me detengo ni paro a pensar. A pesar de que puede ser una anomalía, así sucede. Durante mi carrera le di la vuelta a situaciones así muchas veces. Al final del día, tenemos que ganar el partido. Lo resolveré», comenta.
Su irregular desempeño en el cuarto encuentro también llevó a alimentar los rumores sobre el estado de su mano derecha. Tras vencer a los Clippers en las finales de la Conferencia Oeste, fue el propio base quien explicó que había sufrido un pequeño desgarro de ligamentos. Cuestionado por si eso había tenido algo que ver en su rendimiento, respondió tajantemente. «No. Estoy bien».
El base de los Suns entiende que hubiese cierta euforia tras empezar las Finales 2-0 arriba, pero de igual modo deja claro que en su mente, y en la del equipo, siempre ha estado la certeza de que sería difícil acabar ganando.
Paul dijo que está bien que las Finales sean difíciles, considerando toda la angustia con la que tuvo que lidiar en la cancha en 16 años para llegar aquí.
«Lo odio, pero es así de simple. No hemos barrido salvo en una serie, así que esto es lo que suele sucedes en una eliminatoria. Por eso hacen siete juegos. Estas son las Finales. Es dramático. Tenemos que proteger la cancha local y ganar el partido de mañana», concluye.
(Fotografía de Justin Casterline/Getty Images)