DeMarcus Cousins sigue sumando guiones a su curriculum de salidas de tono. Si ya es por méritos propios el rey de las faltas técnicas, ahora también se ha llevado una reprimenda de la liga por uso de «lenguaje inapropiado».
Siendo exactos, la NBA ha decidido multarle con 50.000 dólares por dirigirse de manera inadecuada a los aficionados en los partidos disputados contra Los Angeles Lakers y Utah Jazz.
Con este toque de atención, Cousins deja claro que el cambio de equipo -fue traspasado de Sacramento Kings a New Orleans Pelicans-, no ha apaciguado en ningún caso su impetuosidad en la pista.
Sin efecto
Si alguien pensaba que la llegada de DeMarcus iba a disparar a los de Luisiana hacia los playoffs se ha equivocado. Desde que cuentan con él, los Pelicans firman un récord negativo desde 2-6. La química con Anthony Davis aún no ha fraguado.