Tras un impoluto 36-0 en el Oracle Arena, llegaron las dos derrotas en casa; una ante los Celtics y otra ante uno de los peores —en cuanto a resultados al menos— conjuntos del año, los Timberwolves. Eso no va a desanimar a Stephen Curry.
Un periodista, más que al tema del cansancio, de una posible dosificación pensando Playoffs o de, como dice Draymond Green, del aburrimiento, recurrió a un nuevo obstáculo: la presión. La que genera poder batir el mejor récord de todos los tiempos en regular season.
«No lo creo», ha dicho Curry con rotundidad para CSN Bay Area. «Nos posicionamos en una perspectiva en la que sabemos que es un objetivo real. Aceptamos el reto. No va a ser fácil conseguirlo, obviamente. Está quedando demostrado ahora. Pero no creo que la presión nos esté haciendo mella en la cancha. No hemos jugado bien dos de los tres últimos partidos de casa, pero todo se amplifica ahora porque estamos cerca de conseguirlo».
Calendario
San Antonio en casa, San Antonio en Texas, y otro par de partidos con esos Grizzlies que ya no asustan a nadie pero prácticamente echan de los Playoffs a los Bulls. Como dice Steph, «no será fácil».