Daryl Morey ha sido anunciado oficialmente como nuevo presidente de operaciones de baloncesto de los 76ers. En su rueda de prensa de presentación, el directivo expresó su entusiasmo por su nuevo cargo y por el gran potencial del roster a cargo de Doc Rivers, a quien había intentado reclutar antes de que firmara por la franquicia de Pensilvania.
«Mi objetivo es ganar un campeonato, así que haremos lo que se necesario para llegar hasta él», destacó Morey durante la conferencia virtual. «Tenemos dos jugadores estrella de 24 y 26 años, por eso no pude conseguir que Doc Rivers viniera a hacer una entrevista en Houston. Vio esta plantilla y dijo: ‘Es increíble, siento no poder volar a Houston para reunirme contigo, Daryl’. Luego, terminó aquí un par de semanas más tarde. Fue muy bueno». En efecto, solo dos semanas separaron el despido de Doc Rivers como entrenador de los Clippers de la renuncia del directivo en Houston.
Morey acordó abandonar los Rockets el mes pasado tras más de una década de vinculación. En ese momento había declarado que planeaba tomarse un año sabático. Una postura que no tardó en virar por completo. Este lunes se encontró sentado junto al propio Rivers, el general manager Elton Brand y el propietario Josh Harris.
«Ese era mi plan [un año sabático]», agregó Morey. «Soy un tipo bastante competitivo pero ese era mi plan. Mi esposa me estaba instando a hacer eso. Pero Elton, Doc y Josh fueron implacables. Francamente, cuanto más te fijas en lo que Elton ha reunido, esta plantilla con Joel y Ben como cabezas de cartel y otros grandes jugadores como Al, Josh, Tobias y algunos jóvenes, solo pude estar con Doc. Él y yo hemos estado charlando mucho. Y cuanto más profundizamos más nos ilusionamos de lo que este equipo puede hacer.»
Los 76ers ingresaron en la temporada 2019-20 con expectativas altísimas que, finalmente, estuvieron lejos de ser cumplidas. El equipo se vio obstaculizado por las lesiones mientras que el tridente formado por Simmons, Embiid y Horford nunca llegó a encajar del todo, condicionando notablemente los quintetos y planteamientos en pista.
Ahora, Morey se encuentra con una plantilla y un sistema muy distintos a los explotados en Houston alrededor del small-ball. Todavía es una incógnita el discernir cómo jugarán estos nuevos 76ers, aunque el directivo ha sugerido que podría haber cambios y aclaró que confía plenamente en las aptitudes de Rivers.
«La forma en la que juguemos dependerá de Doc», afirmó Morey. «Esa es una de las razones por las que estoy tan ilusionado por trabajar con un entrenador campeón como él. Creo que la mejor manera de ganar en la NBA es tomar el talento presente y descubrir cómo utilizarlo de la mejor manera posible. No se trata de forzar el talento a un sistema en particular. Se trata de sacar el máximo provecho de lo que tienes.»
Si bien nadie duda del talento individual de Embiid y Simmons, sí que muchas voces cuestionan la compatibilidad de ambos en la pista, principalmente en la NBA de hoy en la que el triple y el espaciamiento son más cruciales que nunca. Pero tanto Morey como Rivers han descartado la idea de traspasar a alguno de ellos.
«No tengo ninguna duda de que pueden», afirmó Rivers. «Tenemos que cambiar la narrativa. No han ganado todavía pero no es que no puedan hacerlo. El ‘no puedo’ debería eliminarse. Pero tienen una combinación de cualidades que la liga no tiene. Tengo muchas ganas de afrontar este desafío.»
Parte de ese reto también recaerá sobre los hombros de Morey, específicamente en todo aquello que concierne en cómo resolver una plantilla repleta de talento, pero con piezas aparentemente inadecuadas y, en algunas cosas, con un salario no acorde al rendimiento ofrecido.
(Fotografía de portada de Mitchell Leff/Getty Images)