Segunda velada seguida de Jimmy Butler con 38 puntos, lo que le permite igualar su mejor registro de la temporada. Y en esta ocasión, para sus intereses y los de Philadelphia, esas prestaciones ofensivas se saldaron con triunfo. Tras caer el miércoles contra Toronto, Philadelphia visitaba Detroit, lugar complicado donde los Pistons sumaban un buen balance de 9-4 en este curso. Y cerca estuvieron de mejorar ese registro, pero lo dicho, un gran Butler y una remontada visitante tumbaron a los de Michigan (111-117).
Sin Embiid
Joel Embiid se perdió, por descanso, su primer duelo de la temporada. Sin el pívot camerunés los 76ers se resienten, claro está. Y la muestra de ello fue que durante una parte del partido estuvieron perdidos los de Brett Brown, cuando en el tercer cuarto se vieron 15 puntos abajo (71-56). Butler, J.J Redick (18 tantos) y Ben Simmons (18 tantos, 14 rebotes, 6 asistencias, 1robo y 3 tapones) redoblaron esfuerzos en ausencia de Embiid. Pero por instantes, parecía que Andre Drummond y Blake Griffin iban a materializar su cierto dominio interior en una victoria para los de Dwane Casey. Drummond firmó 21 puntos y 10 rebotes, mientras que Griffin se fue hasta los 31 tantos, 12 rebotes y 6 asistencias.
Parciales y técnica
Philadelphia, a ritmo de parciales demoledores, consiguió dejar en nada las desventajas. Primero, con un 5-22 y luego un 2-16 en e lúltimo cuarto. Aunque quizá el momento decisivo llegó con 100-97 para Detroit. Ahí, Dwane Casey recibió una técnica por protestar y fue el principio del fin para los suyos. Porque Redick desde el tiro libre inauguró un parcial de 0-11 del que no se pudieron recuperar ya los Pistons, que se quedan con 13-10, sextos del Este. Philadelphia es tercero de la misma conferencia con 18-9.
Pique Butler- Griffin
El último cuarto asistió a la batalla individual entre Griffin y Butler, reflejo de un periodo de alto voltaje. Ambos jugadores se buscaron y se encontraron. Griffin fue el peor parado y con los Pistons a la deriva ya, trató de parar a Butler con una falta cuando quedaba un minuto y medio y el partido iba 104-110 a favor de los 76ers. En los instantes inmediatos a la señalización de esa personal, Griffin dejó su codo suavemente sobre el rostro de Butler. ¿Resultado? Técnica.
“Ha tratado de ser duro, sacando los codos y todas esas cosas buenas”, apuntaba irónico Butler al término del choque. “No estoy preocupado por ello. Es lo que hace, dejémosle hacerlo”.
(Fotografía de la portada: Gregory Shamus/Getty Images)
