Dallas llegó al All-Star como uno de los equipos más en forma de la competición, y no parece que eso haya cambiado tras la semana de descanso. El cuadro texano ha regresado a la acción sumando su séptima victoria consecutiva tras imponerse a los Suns por 123-113, igualando a los de Arizona en la clasificación y colocándose en puestos de acceso directo a playoffs.
Los movimientos del cierre de mercado parecen haber funcionado a la hora de generar un sistema más equilibrado alrededor de Luka Doncic, que volvió a ser el motor de todo con una nueva exhibición. El esloveno rozó el triple-doble al alcanzar los 41 puntos, 11 asistencias y 9 rebotes, números a los que llegó con un sensacional 6/11 en triples y añadiendo 3 robos de balón. Su nivel a estas alturas ya no sorprende a nadie, pero ahora que parece que la cosa a su alrededor funciona, tal vez un buen final de liga regular de los Mavs pueda reforzar aún más su candidatura al MVP.
A su lado, Kyrie Irving brilló también con 29 tantos, demostrando a la vez su capacidad para jugar junto a Luka y para dirigir al equipo cuando este descansa. Ambos comandaron de esta forma una actuación en la que el resto de hombres no destacaron en exceso en lo individual pero en la que cada pieza dio la sensación de sumar su parte y hacer que el mecanismo nunca dejase de girar. Los texanos sobrevivieron incluso al 1/9 de Tim Hardaway Jr. desde el triple, y pese a que la distancia en el marcador nunca fue enorme pudieron cerrar el triunfo sin demasiados sobresaltos.
Devin Booker, con 35 puntos y 8 asistencias, trató de mantener con vida a los Suns, que arrancaron el choque con buenas sensaciones pero que se fueron viniendo abajo con el transcurso de los minutos. Los de Arizona echaron de menos a Bradley Beal, que se perdió el choque por culpa de unas molestias en su pierna izquierda y cuya ausencia resultó bastante notable, sobre todo ante la poca presencia ofensiva de Kevin Durant.
El alero se quedó lejos de la contribución de Booker, y con 23 tantos nunca terminó de convertirse en la amenaza que ha demostrado poder ser. El ex de los Nets se quedó en un 9/22 en el tiro (2/8 en triples) y perdió un total de 5 balones, lo cual atascó el ataque de Phoenix en la segunda mitad y acabó costándole el partido a los de Vogel.
(Fotografía de portada: Ron Jenkins/Getty Images)