¿Qué hacer con Buddy Hield? Esa es una de las preguntas que sobrevolaba la oficina de Sacramento en octubre de 2019, justo antes de que firmase una extensión de cuatro años por 86 millones de dólares (más 20M en variables), y una de las que casi 12 meses después a implantarse en el seno de una organización que ha optado por dar un giro de timón a su dirección deportiva con la contratación de Monte McNair como nuevo general manager de la franquicia.
El nuevo jefe de los Kings empezó su andadura confirmando la continuidad de Luke Walton como entrenador jefe, algo que hasta cierto punto sorprende al no ser alguien que ha llegado bajo su mando. En todo caso, el hecho de que solo lleve un año en el equipo y que su salida suponga un gasto importante empujan a confiar en él. Con esa carta sobre la mesa, ¿qué ocurre con la plantilla?
McNair aseguró en su primera intervención que le gustaba lo que había, empezando por los jóvenes De’Aaron Fox y Marvin Bagley III, y terminando por Buddy Hield. La situación de este último es uno de los temas candentes en la franquicia californiana, ya que hace escasos días se rumoreó con el interés de Philadelphia por hacerse con sus servicios, algo que alimentó el propio jugador al apoyar publicaciones en redes sociales en las que se hablaba justo de su posible salida a Pensilvania.
Ante tal circunstancia McNair salió al paso con las siguientes palabras. «Creo que todos sabemos que en esta liga abrir la cancha es de suma importancia y que Buddy es uno de los tiradores de élite en esta liga. Vamos a poder utilizar ese conjunto de habilidades mientras implementamos nuestro sistema». Así de tajante se mostraba el ejecutivo, aunque claro, no todo es tan sencillo.
Descontento
Más allá de los deseos del equipo, Sam Amick de The Athletic recalcaba hace escasos días la complicada situación del escolta, cuyo salario pide estar en el quinteto mientras que el pasado curso fue relegado a participar como sexto hombre. Según este periodista, Buddy Hield no se ve a sí mismo como un sexto hombre, rol con el que no es feliz. Además, insiste en su intervención en el podcast de HoopsHype que no es un problema que vaya a desaparecer mientras lanza la pregunta de si habría que explorar el mercado dado el contrato que tiene.
Amick apunta bien. Son quizás muchos millones para un jugador que aún rindiendo a gran nivel –19,2 puntos por partido en 30,2 minutos– fue adelantado en la rotación por Bogdan Bogdanovic. Además, ya en la burbuja de Orlando, hubo hasta cinco partidos en los que no superó los 20 minutos de juego, llegando a quedar en uno de ellos en únicamente 11… ¿Puede cambiar su papel? Por supuesto, pero el hecho de que haya sido el propio Walton quien tomase tal determinación no indica que vaya a ser así.
¿Hay salida?
Lo cierto es que los Kings no tienen comprometido demasiado dinero para la próxima temporada, ya que dos de sus principales jugadores (Fox y Bagley III) aún están inmersos en sus contratos de novato. Por ahí, mantener a Hield percibiendo 26,4 millones de dólares no sería un problema si es realmente lo que deseas. Otra puerta es la de explorar el mercado. Apoyando la tesis de McNair, a nadie escapa que contar con un tirador del nivel de Hield sería el deseo de muchos equipos en una NBA tan enfocada al triple. Por ahí seguro que ofertas no les faltarían. Llegados a ese punto, todo dependería de si creen que están recibiendo a cambio lo que merecen. Aún queda mucha tela por cortar en este asunto.
(Fotografía de Ezra Shaw/Getty Images)