Ha sido sin duda el partido más sorprendente de lo que llevamos de temporada. Unos Lakers con muchas dudas se plantaban en el Garden para jugar contra los Celtics, equipo con mejor balance de la actual campaña de la NBA… Y no sólo eso… ¡Es que lo hacían sin LeBron James ni Anthony Davis!
Con tal escenario, decir que se esperaba un triunfo sencillo de Boston es quedarse cortos. Los chicos de Joe Mazzulla son favoritos al anillo y jugaban con su quinteto de gala. Lo tenían todo a favor, pero quizás por relajación y simplemente por el buen hacer de la ‘unidad B’ de los angelinos, lo cierto es que terminaron sucumbiendo por 105-114 para sufrir una durísima derrota, tanto por el rival como por las circunstancias.
«Todos somos jugadores talentosos. Y esta fue una oportunidad para mostrarle al mundo lo que se puede hacer. Antes del partido nos reunimos y pensamos: ‘Mira, lo mínimo que podemos hacer es salir y jugar tan duro cómo podamos y vivir con el resultado'». comenta Austin Reaves, quien lideró el ataque de los de oro y púrpura con 32 puntos, incluyendo un espectacular 7 de 10 en triples.
Lo cierto es que en el conjunto dirigido por Darvin Ham todo funcionó. Reaves fue el máximo anotador, pero además estuvo acompañado por un excelso D’Angelo Russell que firmó un doble-doble de 16 puntos y 14 asistencias. Y hubo más, ya que otros cuatro jugadores de oro y púrpura estuvieron en dobles dígitos de anotación, destacando los 15 puntos de Rui Hachimura desde el banquillo.
«Si recuerdas la cita de Bron la otra noche: ‘Sal y haz tu trabajo’. Siento que eso es exactamente lo que hicimos esta noche. No fue nada especial. No era como si estuviéramos ejecutando un millón de jugadas del sistema. Salimos y competimos a muerte. Dimos el 110% en el lado defensivo. Competimos. No cometimos muchas faltas. Simplemente cuando vuelvan ellos debemos seguir haciendo lo mismo», sentencia Reaves.
Un Garden inseguro
Tras abrir el curso con hasta 20 triunfos consecutivos como local, los Celtics han caído ahora en tres de los últimos cinco enfrentamientos ante su público. Están pasando por un mal momento y anoche quedó claro pese a los 23 puntos de Jayson Tatum y los 17 de Kristaps Porzingis, insuficientes para detener a unos Lakers que estuvieron en todo momento a gran nivel.
«Simplemente son cosas que pasan. Hay rachas en las que juegas mal al baloncesto. No podemos sentarnos aquí y actuar como si tuviéramos derecho a que no nos ocurriese a nosotros. Es algo que sucede. Ahora es cuestión de cómo respondemos y cómo lo superamos», sentencia Mazzulla, head coach de los Celtics.
(Fotografía de Brian Fluharty/Getty Images)