Los Orlando Magic se han sumergido en un profundo proceso de reconstrucción que les llevará tiempo y paciencia. Un desenlace inevitable después de que los resultados del anterior proyecto se limitaran a dos apariciones en playoffs en nueve temporadas. Ambas saldadas con una eliminación en primera ronda.
Así, los primeros compases de esta nueva etapa señalarán al desarrollo de los jóvenes y el establecimiento de una nueva filosofía, sin que el número de victorias condicione, en ningún caso, los objetivos marcados. «Lo dijimos desde el primer día. Se tratará de mejorar cada día», afirmó el head coach Jamahl Mosley según recoge el medio Orlando Sentinel. «Se tratará de jugar duro, hacerlo unidos y trabajar en equipo todos los días. Los resultados llegarán por sí mismos si hacemos eso. No vamos a poner un número frente a nosotros. Solo venimos a hacer nuestro trabajar y mejorar».
La franquicia de Florida presenta una de las diez plantillas más jóvenes de la NBA, con una edad promedio de 24,7 años. Un núcleo de jóvenes que no supera los 24 años de edad y que cuenta con grandes promesas como Jalen Suggs, Franz Wagner, R.J. Hampton, Cole Anthony o los más veteranos Wendell Carter Jr., Jonathan Isaac, Mo Bamba, Markelle Fultz y Chuma Okeke.
Si la juventud ya no precisara de un arduo trabajo de pulimento, cohesión y desarrollo, el caso de los Magic es todavía más crítico a causa de las lesiones. Con gravedades y tiempos de recuperación muy distintos, los de Florida arrancarán la temporada este miércoles sin Isaac, Fultz, Okeke, Moore y la duda de Suggs por un proceso estomacal.
De este modo, los Magic afrontarán la temporada como un periodo de evaluación de talento, sin ningún tipo de presión y con un ojo puesto también en lo que pueda deparar el draft de 2022. «No hemos establecido objetivos de referencia», aseguró Jeff Weltman, presidente de los Magic. «Se trata de crecer y desarrollar nuestros jugadores, de jugar duro. Queremos que estos muchachos jóvenes aprendan lo que se necesita para ganar en la NBA.»
(Fotografía de portada de Maddie Meyer/Getty Images)